Irán no detendrá su programa nuclear
Irán anunció que ninguna presión por parte de la ONU desalentará su programa nuclear, un día después de que el Consejo de Seguridad acordó un plan para imponer nuevas sanciones.
"Tenemos un ciclo de combustible nuclear. No nos rendiremos bajo la presión. Ustedes (Occidente) no pueden bloquear la senda de la nación iraní realizando reuniones", expresó el presidente Mahmoud Ahmadinejad en una manifestación en la ciudad de Khatam, en el centro del país, informó la agencia de noticias oficial IRNA.
Teherán enfrenta duras críticas en el plano internacional por sus actividades atómicas que según las potencias occidentales buscarían la fabricación de armas, bajo la fachada de un programa civil, algo que la república islámica niega.
Un borrador de resolución acordado por los cinco miembros del consejo, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, China y Rusia y por Alemania, se envió el jueves al consejo de 15 naciones para una votación anticipada la próxima semana.
El proyecto busca nuevas sanciones sobre Irán por rehusarse a suspender el enriquecimiento de uranio, que puede ser usado para generar energía, pero también en bombas nucleares.
A pesar de que Ahmadinejad dijo el jueves que el Consejo "no tiene legitimidad entre las naciones", el mandatario ha solicitado dirigirse al organismo cuando el tema vaya a votación, para defender el derecho de Irán a la tecnología nuclear.
El Consejo discutirá la resolución el miércoles y se espera una votación hacia fines de la próxima semana.
"Irán no miente"
El ayatola Mohammed Emami-Kashani, insistió el viernes en que Teherán está siendo honesto con las intenciones civiles de su programa nuclear.
"No estamos mintiendo. Nuestro trabajo atómico es para servir a la nación, no para fabricar armas", dijo el viernes el ayatolá, miembro del más importante ente de mediación de Irán, durante un sermón que se transmitió en vivo a través de la radio estatal.
El Consejo de Seguridad impuso sanciones comerciales a Irán en diciembre sobre material nuclear delicado y tecnología, y congeló activos de algunos individuos y compañías iraníes.
Irán ignoró el plazo entregado hasta el 21 de febrero para suspender el enriquecimiento de uranio. Al desafiar la fecha, la república islámica se enfrenta a posibles sanciones más duras.