Berlusconi va otra vez a elecciones
Italia convocó a una elección anticipada para mediados de abril, en la antesala a un posible retorno al poder del magnate de los medios Silvio Berlusconi, que tiene un sólido liderazgo en las encuestas sobre la colapsada coalición de centroizquierda.
En una secuencia dramática de eventos, aún para los estándares italianos, el primer ministro Romano Prodi renunció a su puesto el mes pasado después de que aliados de la coalición se retiraron, fallaron los intentos por formar un Gobierno interino y Berlusconi instó a convocar elecciones anticipadas.
Berlusconi, de 71 años y propietario del club de fútbol AC Milan, se resistió al intento del presidente Giorgio Napolitano por lograr un apoyo multipartidario para reformar las cuestionadas reglas de votación de Italia antes de celebrar nuevas elecciones.
"Lamento tener que llamar hoy a los votantes de nuevo a los centros de votación sin que esas reformas se hayan aprobado", dijo Napolitano después de que él y Prodi, ahora primer ministro interino, firmaran un decreto disolviendo el Parlamento tres años antes de lo previsto.
El gabinete de Prodi se reunió más tarde para fijar una fecha para la votación, para el 13 y 14 de abril, cerca de las elecciones locales, que podrían adelantarse para "reducir los costos y los inconvenientes", dijo Prodi.
Berlusconi, líder de Forza Italia, y que ha sido primer ministro dos veces antes, tiene un liderazgo consistente en las encuestas de opinión, superando a la fragmentada centroizquierda de Prodi por 16 puntos.
Su rival será el alcalde de Roma, Walter Veltroni, de 52 años, que apoyaba un gobierno interino para cambiar las leyes electorales, ampliamente culpadas por la fragilidad del Gobierno de Prodi, el número 61 de Italia desde la Segunda Guerra Mundial.
El Parlamento ha sido disuelto aproximadamente nueve veces antes y sólo uno ha durado menos que la legislatura de 20 meses que dio a Prodi tantas dificultades.
El ex presidente de la Comisión Europea, de 68 años, dos veces victorioso sobre Berlusconi en elecciones y en ambas oportunidades hundido por inestables aliados -los comunistas en 1998 y ahora un partido católico- confirmó que no se presentaría para la reelección.
El sector empresarial ha exhortado a los políticos a enterrar sus diferencias y trabajar por los intereses del país en momentos en que la confianza ha decaído, el crecimiento se está enfriando y la inflación está en alza.
La coalición de centroderecha de Berlusconi está intentando reclutar al pequeño partido católico cuya deserción hundió a Prodi, mientras que la izquierda dura, ofendida por la decisión de Veltroni de presentarse solo con su Partido Democrático, consideraba presentar su propio candidato.
