Chávez y Uribe, como si nada
Los presidentes de Colombia, Alvaro Uribe, y de Venezuela, Hugo Chávez, envueltos en duros encontronazos desde hace meses, enfundaron sus espadas durante la cumbre sudamericana del viernes en Brasilia.
Los mandatarios, junto a colegas y líderes de los otros 10 países de la región, suscribieron el Tratado Fundacional de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) y se dieron una tregua.
"Yo me vi con Uribe y nos dimos la mano, nos dimos la mano y nos paramos a hablar de manera, debo decirlo, muy distendida (...) varios minutos, yo diría que unos 10 minutos", dijo Chávez en conferencia de prensa.
El mandatario, acostumbrado a lanzar duros ataques contra el Gobierno de Estados Unidos, que tiene en Colombia a su mayor aliado de la región, dijo que estuvieron rodeados de sus equipos, algunos periodistas y fotógrafos.
"Yo le manifesté 'aquí está esta mano (...) y no sólo la mano, presidente, aquí está este corazón, aquí estoy yo a nombre del pueblo venezolano dispuesto a retomar el camino que habíamos venido llevando, con diferencias, pero con respeto'", expresó el gobernante venezolano.
Las diferencias entre Chávez y Uribe se agudizaron desde que en enero el presidente colombiano puso fin a la mediación que realizaba su colega para que la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) liberara a algunos de sus rehenes.