Sarkozy rechaza plan nuclear de Irán
El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, dijo el lunes ante el parlamento de Israel que es ''inaceptable'' que Irán fabrique armas nucleares.
Pero el mandatario francés también tuvo duras palabras para el gobierno de Israel, y le pidió que cese la construcción de asentamientos en la Cisjordania. Además señaló que Israel y los palestinos deben compartir Jerusalén bajo un acuerdo final de paz.
Israel, un país con armas nucleares, aunque su gobierno se ha negado a admitirlo de manera oficial, ha denunciado que Irán trata de conseguir armas nucleares.
En su discurso del lunes, Sarkozy dijo que no sólo Israel, sino toda la Unión Europea están preocupados acerca del programa de armas atómicas de Irán.
''Si Irán fabrica armas nucleares, eso es inaceptable para nuestro país'', dijo Sarkozy.
El presidente de Francia ha propuesto previamente una solución diplomática con Irán para evitar lo que él calificó de ''catástrofe'' que sería causada por una bomba atómica iraní, o por un ataque contra Irán.
La semana pasada, funcionarios de defensa de Estados Unidos dijeron que Israel había realizado grandes maniobras militares en el Mediterráneo oriental, intentando mostrar la capacidad de su fuerza aérea para atacar instalaciones nucleares iraníes.
Israel confirmó los ejercicios militares, pero se negó a decir si el propósito de los mismos era realizar un ensayo general antes de bombardear Irán.
Sarkozy recibió una cálida bienvenida en el parlamento israelí. Pero los legisladores no se mostraron muy entusiasmados sobre sus posiciones con respecto a los palestinos.
El presidente de Francia dijo que Israel debe frenar la construcción de asentamientos en la Cisjordania, una demanda palestina respaldada por la comunidad internacional.
También dijo que ''no puede haber paz si no se reconoce a Jerusalén como la capital de dos estados, con garantías de libre acceso a los lugares santos de todas las religiones''.
Israel capturó Jerusalén oriental en la guerra de 1967 y de inmediato anexó el área. Los palestinos exigen la entrega de Jerusalén oriental como capital de un futuro estado independiente.
