EU condiciona recursos a México
El embajador estadounidense en México, Carlos Pascual, adelantó que el Departamento de Estado entregará la próxima semana al Senado de su país un informe sobre la situación de los derechos humanos en territorio mexicano. Sobre esa base, señaló, se liberarían los recursos pendientes de la Iniciativa Mérida, y adelantó que la Unión Americana cuenta con mucha información entregada en específico por el secretario de la Defensa Nacional, Guillermo Galván Galván.
En su primera conferencia dada en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, el diplomático aseguró que el gobierno mexicano ha tratado el tema con seriedad, por ello el gobierno de Estados Unidos ha manifestado su respeto y voluntad absoluta de colaboración en la materia.
Carlos Pascual sostuvo que el presidente Felipe Calderón, en el encuentro con su homólogo Barack Obama, reconoció que el Ejército no se quedará de manera indefinida a cargo de la seguridad en el país, aunque sí lo hará mientras se capacita a la "policía civil" que se debe hacer cargo del tema.
Explicó que de manera paralela se tiene que fortalecer el sistema judicial, y que ambos gobiernos están conscientes de que el respeto a los derechos humanos "debe mejorar ahora mismo en cualquier forma práctica".
El diplomático estadounidense se refirió también a la seguridad fronteriza, y argumentó que el gobierno de su país seguirá colaborando con México para garantizar la seguridad en el límite entre ambos países.
Sin embargo, aseguró que en la visión de Estados Unidos, México también debe mejorar la seguridad en la frontera con Centroamérica para "cortar la capacidad y la perspectiva de la delincuencia organizada en esa zona".
Reconoció que en su país se debe trabajar para reducir la demanda de las drogas y el tráfico de armas y dinero hacia México para disminuir la capacidad de operación de la delincuencia transnacional.
El embajador estadounidense aceptó que en el mundo interconectado de la actualidad, México y Estados Unidos deben trabajar conjuntamente para responder a las obligaciones que tienen con sus pueblos.
Es una realidad que por un lado exista para los jóvenes la alternativa de una vida legal y con trabajo, y por otro lado el narcotráfico, argumentó.
Por ello "tenemos que hacer el reclutamiento de lado positivo y si los Estados Unidos podemos ayudar a México mejorando la competitividad y creando empleos, lo haremos con mucho gusto", aseveró.
Carlos Pascual, quien presentó sus cartas credenciales al gobierno mexicano el pasado 9 de agosto durante la Cumbre de Líderes de América del Norte en Guadalajara, Jalisco, se refirió también al tema migratorio.
Dijo que una reforma en esa materia será difícil pero es necesaria por la necesidad de trabajo de los mexicanos y de mano de obra de los estadounidenses.
En todo caso convocó a observar el tema de manera completa, es decir, ver el mercado en su conjunto para observar las ventajas que representa para ambos países la posibilidad de un flujo migratorio legal, seguro y ordenado.
Se trata de una legislación con perspectivas globales que debe considerar a la migración no solamente desde el punto de vista del trabajo sino de la competitividad de ambos países y de la región, aseveró.
Cuestionado sobre la supuesta especialidad que se le atribuye como diplomático de representar a Estados Unidos en países con "Estados fallidos", el diplomático señaló que México no es un Estado fallido.
Por el contrario, dijo, el país tiene una democracia sólida cuyo funcionamiento se demuestra porque el 5 de julio pasado ganó la oposición y no hubo ningún problema.
Asimismo es un país que cuenta con instituciones sólidas en materia de seguridad, con una policía que está mejorando, un ejército que cumple con su deber y que ya emprendió una reforma judicial "que nosotros vamos a apoyar".
Recordó que la economía de México es la decimosegunda en el mundo y que participa en el Grupo de los 20 como un actor fundamental que está llamado a tener un indiscutible liderazgo en el mundo en la conformación del nuevo orden internacional.
Por ello, abundó, en la reunión de Guadalajara los mandatarios de América del Norte asumieron compromisos en un marco de igualdad entre las naciones, porque México es una nación fuerte, con instituciones sólidas, y con toda la capacidad para convertirse en un actor fundamental para el siglo XXI.
Reconoció encontrarse sorprendido por lo que encontró en Guadalajara durante la Cumbre de Líderes de América del Norte.
"Vi un México vibrante, con un pasado glorioso y al mismo tiempo un México nuevo con una enorme capacidad no sólo para producir sino para generar un gran movimiento intelectual que será fundamental en el mundo de este siglo", destacó.
