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Fotos: Cuartoscuro
Una mancha café tiñe las blancas playas de Quintana Roo cada amanecer. Y, a pesar de los esfuerzos de autoridades, hoteleros y voluntarios, se empiezan a sentir las afectaciones económicas.
La Asociación de Hoteles de Cancún y Puerto Morelos analiza bajar sus tarifas entre 15% y 20% para lograr los objetivos de ocupación para el año.
Según la Sedetur, la ocupación hotelera en Cancún y Puerto Morelos cayó 2.8% del 1 al 22 de mayo, en comparación con el mismo periodo de 2018. En la Riviera Maya la caída fue de 2.3%.
Más suerte tienen destinos como Cozumel, Isla Mujeres y Chetumal, donde el efecto del sargazo es menor, donde incrementó 3.3%, 2.3% y 20.2%, respectivamente.
Aunque el sargazo es solo uno de los problemas que aquejan a Quintana Roo. La percepción de inseguridad y las alertas emitidas sobre la situación en el país sigue siendo su principal reto.
Los hoteleros señalan que la percepción de inseguridad va de la mano con una falta de promoción turística en la región.
Por eso, demandan a las autoridades que todo el impuesto de hospedaje, que suma 1,500 millones de pesos, se destine a promoción y publicidad del destino, sobre todo, en Estados Unidos.