Antecedentes para entender el Super Bowl entre Acereros y Empacadores
Dos históricos equipos... dos mariscales de campo superestrellas... un lugar icónico.
El Super Bowl 45 que se juega el domingo entre los Acereros de Pittsburgh y los Empacadores de Green Bay en el Estadio de los Vaqueros en Dallas tiene todos los ingredientes para igualar la inevitable emoción que acompaña al romance de Estados Unidos con la final de la temporada de la NFL.
Las calles estarán desiertas mientras más de 100 millones, sólo en Estados Unidos, observan la televisión, pero no es sólo la acción en el campo lo que atrae a esta masiva audiencia.
La lista de presentaciones que se han realizado en el previo del juego y en el medio tiempo es una muestra de quién es importante entre las celebridades del rock y del pop , incluyendo a Paul McCartney, Bruce Springsteen, los Rolling Stones y The Who.
Este año, el ícono del pop Christina Aguilera cantará The Star-Spangled Banner justo antes de la patada inicial, mientras que las presentaciones del medio tiempo estarán encabezadas por el grupo Black Eyed Peas.
Ciertamente, uno de los incidentes más comentados en un Super Bowl tuvo lugar en el espectáculo de medio tiempo en 2004 cuando Janet Jackson sufrió un “mal funcionamiento en su vestuario” que alzó varias cejas y fue el video más visto en internet.
Los cantantes de este año , a falta de las tradicionales porristas ya que ninguno de los dos equipos cuenta con ellas, tratarán de evitar el percance que le sucedió a Jackson, y mientras estén en el campo la presión será incluso más inmensa.
Los Acereros de Pittsburh han obtenido más victorias en el Súper Tazón que ninguna otra franquicia con seis triunfos y una sola derrota. Los Empacadores de Green Bay reclamaron los dos primeros torneos en 1967 y 1968, y luego consiguieron otro triunfo en 1996.
Los Acereros también ganaron un récord de ocho campeonatos de la AFC (Conferencia Americana de Futbol, por sus siglas en inglés), incluyendo su victoria 24-19 sobre los Jets de Nueva York para alcanzar esta temporada del Super Bowl.
Los Empacadores lograron un récord de nueve campeonatos de la NFL antes de que el Super Bowl fuera instituido y su victoria de 21-14 contra sus archirrivales los Osos de Chicago fue su tercer campeonato NFC (Conferencia Nacional de Futbol, por sus siglas en inglés).
Así que, con dos equipos con una larga historia y un rango impecable, se prevé un espectáculo clásico, particularmente después de que su último enfrentamiento terminó en una emocionante victoria de 37-36 para los Acereros.
Mucha de la especulación previa al partido se centra alrededor de los mariscales de campo estrella del equipo: Ben Roethlisberger de los Acereros y Aaron Rodgers de los Empacadores.
Les fueron entregados sus propios podios para dirigirse a la gente reunida el jueves, en el tradicional día de medios, mientras que los otros jugadores estaban en sus puestos designados en el estadio de los Vaqueros.
Los mariscales de campo son la clave
Pero esa atención conlleva una increíble responsabilidad, un pase mal colocado o interceptado puede hacer la diferencia entre un triunfo o la desesperación en el Super Bowl, cuya historia está plagada de historias de mariscales de campo de bajo rendimiento.
Roethlisberger ha estado allí y ya lo ha hecho , ayudando a los Acereros a ganar el Super Bowl en 2005 y 2008, con pase de 35 yardas a Santonio Holmes que selló su triunfo más reciente.
Y fue el pase de Big Ben al receptor Mike Wallace en la última jugada del partido el que dio a los Acereros ese estrecho margen de un punto para ganarle a los Empacadores la última vez que se encontraron hace más de un año.
“Fuimos los suficientemente afortunados para ganar, pero lo que sucedió en el Campo Heinz en 2009 no tendrá cabida en este estadio. Muchos componentes de estos equipos son distintos”, dijo el entrenador de Pittsburgh, Mike Tomlin.
Rodgers finalmente tomó el relevó en los Empacadores de manos del gran Brett Favre en 2008 y su carrera profesional de cinco años lo ha convertido en el líder de todos los tiempos con el mayor porcentaje de pases completos en la temporada regular, con el menor número de intercepciones.
Eso demuestra la precisión que tal vez será invaluable la noche del domingo cuando busque su primer anillo de Súper Tazón.
Los fanáticos de los Empacadores desearán que Rodgers tenga la oportunidad de mostrar su celebración única de touchdown, denominada “El cinturón de Camponato”.
Después de una jugada de anotación o touchdown, Rodgers hace un movimiento para colocarse un cinutón imaginario alrededor de su cintura.
Pittsburgh confiará en su altamente calificada defensa para familiarizarse tempranamente con el novato del Super Bowl e interrumpir su ritmo.
Así que el escenario para un clásico será en un estadio de Texas que se enorgullece de ser el más grande y el mejor.
De acuerdo con el sitio oficial de los Vaqueros de Dallas, es el mayor estadio domo del mundo, tiene las mayores puertas retráctiles en cada lado y posee la mayor pantalla de video.
El mayor estadio del mundo es capaz de albergar a 80,000 aficionados con una máxima capacidad de 110,000.
Si contamos el número de boletos para ver el partido fuera del estadio, el récord para un juego de campeonato de la NFL, de 103,985 en el Tazón de las Rosas en Pasadena, California en 1980, podría ser fácilmente roto.
Con tanto interés pese a la crisis económica en Estados Unido s, los anunciantes están aún dispuestos a pagar 3 millones de dólares por un anuncio de 30 segundos en la transmisión de Fox, en la que los comerciales establecerán otro récord.
La única nube en el horizonte del esperado encuentro es el espantoso clima en Dallas, con temperaturas bajo cero que han obligado a los equipos a practicar en el interior del estadio de los Vaqueros, cubierto de nieve.