Tiger Woods, listo para competir por un quinto título de Masters

Desde la abuela hasta el nieto, desde sus fanáticos hasta sus enemigos, las multitudes en Augusta están felices de que Tiger Woods esté de nuevo en forma y listo para competir por un quinto título de Masters.

Como Arnold Palmer tenía un ejército, Tiger ciertamente tiene una tropa.

Miles de personas se formaron en las calles frontales del club de golf de Augusta la mañana del martes mientras Woods jugaba una ronda de práctica.  Se amontonaban alrededor de los greens y se movían del tee al green como olas en cada lado de la calle.

“Creo que atraerá a muchas personas de nuevo en el juego”, dijo Will Brown, un residente de Augusta que ha estado siguiendo a Woods con su esposa y sus dos hijos. “Es bueno para el golf”.

Mientras hablaba, su hijo, Zeke, de 6 años, tiró del pantalón de su padre, pidiendo ir a la práctica para esperar por el autógrafo de Woods.

“Es muy especial”, dijo Zeke sobre su estrella favorita de golf.

Woods tuvo su primera victoria oficial en el PGA Tour en dos años y medio hace dos semanas, ganando el Arnold Palmer Invitational en la Bahía de Florida por cinco golpes. También fue su primera victoria desde la revelación de sus infidelidades maritales, lo que lo llevó al divorcio.

En los meses entre estas victorias, su juego cayó en picada y se desplomó del primer lugar en los rankings de golf mundial, incluso saliéndose de los primeros 50 lugares. Ha regresado al número siete y también con los fanáticos.

Leo Brown, un hombre de 60 años de Greenville en Carolina del Sur estaba contento de ver a Woods regresar a la columna de ganadores.

“Les mostró a los que dudaban de él que todavía juega”, dijo Brown.

Algunos nunca dudaron de él, incluido Qabaniso Lupafya, originario de Zimbabwe quien se mudó a Massachusetts hace 26 años, y ahora vive en Worcester.

“Amo a Tiger. Estoy obsesionado con él”, dijo Lupafya, quien también responde por el nombre de Frank para los que no pueden pronunciar su nombre. Dijo que su meta es jugar con Woods algún día.

Lupafya, un exjugador de rugby, dijo que ver a Woods; y una horrible lesión en la rodilla, lo inspiró a retomar el golf cuatro años. Está a seis hándicaps, dijo, y ha ganado torneos locales, pero sólo estará viendo a Woods desde el otro lado de las cuerdas en Augusta.

“Tengo una cita con Tiger. ¡Ya verán!”, dijo el martes en la mañana, corriendo hacia la novena calle en búsqueda de su ídolo.

Gary Hanson de Palm Beach, Florida, también tuvo una cita con Tiger en la mañana del martes, pero no cuenten con que es uno de los fanáticos de Woods.

Eso es porque Woods no respeta a sus fanáticos, dijo, añadiendo que la estrella del golf ha hecho muy poco para reconocer sus porras en la ronda de práctica del martes por la mañana.

“Sin los fanáticos, ¿dónde te encuentras?”, preguntó Hanson. Entonces, ¿por qué estaba haciendo la caminata hacia la novena calle de Augusta por una simple práctica el martes por la mañana?

“Mi esposa lo ama”, dijo. Miró sobre las cuerdas a donde estaba su esposa, Gail, que siguió a Woods hasta el green número seis. “¡Está enamorada de él!”

Hanson preferiría, dijo, seguir a Phil Mickelson.

“¿Y sabes qué? Porque él interactúa con los fanáticos”, dijo Hanson.

No les digas a los niños que Woods no interactúa.

Por el green de práctica, se juntaron dentro de la zona de autógrafos, esperando que Woods les firmara lo que tenían a la mano.

      Alec Cwienkala, un niño de 13 años de Allentown, Pennsylvania, obtuvo la firma de Woods en su bandera.

“Fue fantástico estar cerca de él”, dijo Alec, quien esperó 90 minutos en la zona de autógrafos.

Woods y los otros principiantes de los Masters han sido ejemplos para su propio juego, dijo Alec.

“Trato de hacer mi swing como todos los profesionales”, dijo el joven golfista.

Y quizá ver a Woods es algo que inspirará a nuevas generaciones de jugadores a llevar el juego a otros nuevos niveles.

Vicki Martin de St. Cloud en Minnesota, dijo que piensa de que existe algo en ese argumento.

“Tiger hace que estos niño sean lo que son hoy en día”, dijo Martin, señalando que el régimen atlético y de acondicionamiento de Woods ha marcado un estándar para otros y elevado el juego como un todo.

Martin dijo que Woods ha inspirado a su nieto de 13 años.

“Está obsesionado con Tiger”, señaló. “Dice, ‘quiero jugar en los Masters’”.

Woods ha elevado más que el deporte, dijo Jim Banks, un coronel retirado del ejército de Fort Hood en Texas.

Eso es porque Woods atrae a la gente a los eventos del PGA Tour, así las organizaciones de caridad que el golf apoya podrá hacer más para los que lo necesitan.

“Piensa en los ingresos creados para las organizaciones de caridad”, dijo Banks. “Es él, él sólo, el que hace eso”.

A lo largo de Washington Road, la ruta principal desde la Carretera 20 hasta el campo, el resurgimiento de Woods está teniendo otro efecto económico. Aquellos que vienen a Augusta sin boletos están pagando más para comprar pases de los corredores de carretera.

Tye Bedwell de Chattanooga, Tennessee, su hermano y un amigo tuvieron la suerte de encontrarse con dos pases con el valor normal de parte de un motociclista que iba pasando por allí, dijo Bedwell. Pero aún necesitan un tercer boleto y no han encontrada nada que sea más barato que 350 dólares en la noche del martes.

“No vamos a pagar 350 dólares”, dijo.

“El precio del boleto se ha disparado”, dijo Randall Matod, quien agregó que había estado cambiando boletos en la Avenida Washington por los últimos 30 años.

Ha vendido pases para la ronda de práctica del martes por 250 dólares, dijo, pero estaba buscando un nuevo inventario para la hora del almuerzo. Para la ronda final del domingo, estarán en 500 dólares; y tal vez más, señaló, pero el hecho de que el domingo es Pascua está haciendo que el precio se enfríe un poco.

Por supuesto, esa deducción del domingo de Pascua puede ser eliminada si Woods encabeza el liderato en la noche del sábado.

“No podría decir que lo estoy empujando a que gane. Sólo hace el golf más interesante”, dijo Jordan Myers de Columbia en Carolina del Sur, quien estaba buscando a Woods con su hermano y su padre.

“El golf es mucho mejor con Tiger”, dijo el padre de Alec, Steve Cwienkala. “Ya sea que lo ames o lo odies, el deporte lo necesita”.