Republica Dominicana es campeón invicto del Clásico Mundial de Béisbol
República Dominicana ganó por primera vez el Clásico Mundial de Béisbol al derrotar a Puerto Rico , por blanqueada de 3-0, en la gran final disputada en el AT&T Park de San Francisco, California, este martes.
El conjunto dominicano hizo historia como campeón invicto, al triunfar en los ocho partidos que disputó, lo que no se había logrado en las dos primeras ediciones que ganó Japón, primero con récord de cinco ganados y tres perdidos y después con marca de siete victorias y un descalabro.
Para la novena dominicana, este título tiene un sabor a revancha, ya que en la edición anterior sufrió un estrepitoso fracaso al ser eliminado en la primera ronda de la justa celebrada en 2009.
Cuatro años después, los dominicanos armaron un gran conjunto con Tony Peña como manager y Moisés Alou como gerente general. Así, alzaron el trofeo ante poco más de 35,000 aficionados en el AT&T Park.
Fue en el primer inning cuando República Dominicana se encaminó al triunfo, al anotar en dos ocasiones. José Reyes abrió el partido con doblete a lo profundo del callejón del derecho central y avanzó a la antesala con toque de sacrificio de Erick Aybar.
Robinson Canó recibió pasaporte intencional lo que dejó el escenario para que se presentara Edwin Encarnación y con un doblete a lo profundo del jardín central remolcara las dos primeras anotaciones del representativo dominicano.
En el quinto rollo, Dominicana dejó las cifras definitivas en el marcador, al lograr una carrera más.
La victoria se le concedió al abridor Samuel Deduno, quien lanzó por espacio de cinco entradas completas en las que no le anotaron carrera, le batearon par de imparables, ponchó a cinco y concedió tres bases por bolas. Tuvo la ayuda del relevista Fernando Rodney, quien logró su séptimo salvamento de este certamen.
La derrota fue para el abridor de Puerto Rico Giancarlo Alvarado quien tiró por espacio de una entrada completa en la que le anotaron dos carreras, ambas limpias, le batearon par de imparables, no ponchó y regaló una base por bolas.
