Monterrey vence al LA Galaxy y va a su tercera final de 'Concachampions'
El Monterrey alcanzó este miércoles su tercera final consecutiva de la Liga de Campeones de la Concacaf, al vencer 1-0 al Los Ángeles Galaxy de Estados Unidos con un gol de Aldo de Nigris.
Los Rayados, campeones de las últimas dos ediciones de la Concachampions, se enfrentarán al Santos Laguna en un juego idéntico al de la final anterior, por el derecho a representar a la Concacaf en el Mundial de Clubes que se jugará este año en Marruecos.
La final de ida se jugará el 24 de abril en el estadio del Santos —en Torreón, Coahuila— y la de vuelta, el 1 de mayo en Monterrey, Nuevo León.
De Nigris llevó a los Rayados a su tercera final al anotar en el minuto 81 el gol que decidió la victoria, en el partido jugado en el Tecnológico de Monterrey. El marcador global terminó 3-1.
El equipo de Víctor Manuel Vucetich creció a medida que avanzaron los minutos y al final ejerció un dominio claro ante el Galaxy, que terminó con un juego disperso y nervioso en su intento por anotar.
El partido arrancó marcado por el poco dominio de balón y la imprecisión en los pases de los dos equipos, pero con el tiempo Monterrey fue imponiendo su futbol.
El irlandés Keane y el estadounidense Landon Donovan encabezaron el ataque del Galaxy, que apostó por un cuadro ofensivo para tratar de darle la vuelta al 1-2 marcado por el Monterrey hace una semana.
El doble campeón mexicano salió con su cuadro titular y dominó el juego ya avanzado el primer tiempo, aunque sólo tuvo un par de llegadas peligrosas a la meta del cuadro angelino.
Aldo de Nigris y Humberto Suazo acabaron sus llegadas con tiros desviados; mientras que las llegadas del Galaxy fueron de González en un tiro corto en un balón que perdió de vista la defensa y un tiro de rebote de Keane.
El conjunto mexicano volvió a poner la iniciativa tras el descanso y con llegadas más claras se mantuvo como un peligro constante hasta el minuto 81, cuando cayó el gol de Aldo de Nigris.
Severo Meza mandó la pelota al área para la llegada de Delgado, que centró para que De Nigris conectara un disparo firme que se coló entre las piernas del portero angelino.