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Cristiano Ronaldo, una historia 'dorada' de récords en el futbol mundial

Su valor en el mercado de piernas, su potencial con los equipos que ha jugado y los goles para su selección han encumbrado al portugués
lun 13 enero 2014 02:54 PM

Cristiano Ronaldo dejó de ser la dama de honor, para nuevamente ser la novia en la gala del Balón de Oro al consagrarse este lunes como el mejor jugador del mundo.

Si no fuera por Lionel Messi, la estrella portuguesa hubiera sido el futbolista del mundo en tres ocasiones. Pero este lunes los votos se fueron a favor de CR7.

Cristiano ganó con el 27.99% de los votos, por delante del delantero argentino del Barça Lionel Messi (24.72%) —solo por 160 puntos— y del atacante francés del Bayern Munich Franck Ribery (23.36%).

El futbolista de 28 años se perfilaba como el favorito para llevarse el título este lunes, que reflejaría otra temporada prolífica con los colores del Real Madrid y Portugal.

"Esta es una recompensa individual pero quiero compartirla con mis compañeros del Real Madrid y de la selección de Portugal. Si me lo dieron es porque lo merezco, pero también lo merecían Messi o Ribéry que son grandes jugadores que hicieron una gran temporada", dijo tras recibir el premio.

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Cristiano superó a Messi —quien esta temporada ha tenido que luchar con las lesiones— y anotó un triplete para ayudar a su país a negociar un pase complicado en contra de Suecia y asegurar un lugar en el Mundial de Brasil.

El delantero del Real Madrid terminó el año como el máximo anotador con 69 goles de los cuales 10 fueron con su selección nacional, lo que lo hicieron merecedor del Balón de Oro, el segundo que gana en su carrera.

Nacido en la isla de Madeiras en 1985 en un entorno muy humilde, la vida de Cristiano es la de un niño destinado a triunfar en el mundo del futbol, con unas condiciones innatas, según apunta la agencia EFE.

En la inauguración del mes pasado de su Museo en su ciudad natal de Funchal, Ronaldo dijo a los reporteros: “Tengo espacio para más trofeos. En realidad no quiero mencionar trofeos específicos. Todo lo que quiero es ganar más premios y, si el Balón de Oro llega, hay espacio extra aquí”.

Cristiano comenzó a experimentar con el futbol profesional a los 17 años. Su talento en el Nacional no pasó inadvertido para el Sporting de Lisboa, que lo fichó tras superar una exigente prueba de tres días. Era el primer reto superado de una larga lista que se marcó él mismo.

Se trasladó a la capital portuguesa para comenzar a escribir su leyenda siendo un niño, asesorado por tutores que le orientaban en sus estudios, psicólogos que le ayudaban en su etapa de adolescencia y médicos que vigilaban su crecimiento físico, según la agencia EFE.

En octubre de 2001, sin ser aún mayor de edad, fue titular por primera vez en la Superliga portuguesa. Era su primera temporada en la élite y ya saboreaba el éxito. Fue campeón de la competición portuguesa en la temporada 2001-2002.

Pasó de ser referente del Sporting de Lisboa, cuna de Luis Figo o de Joao Pinto, a fichar por el Manchester United, una operación en la que mucho tuvo que ver el irlandés Roy Keane, por entonces capitán de los Red Devils. Equipos como el Juventus italiano le deseaban, pero su destino fue Inglaterra, donde Sir Alex Ferguson se convirtió en su padre deportivo.

Fascinado por su velocidad en la inauguración del estadio José Alvalade para la Eurocopa de 2004, Ferguson dio la orden de fichar a ese joven jugador que se escapaba de todos sus rivales. Por 17.5 millones de euros, el Manchester United encontró al sustituto de David Beckham. El icono del equipo ponía rumbo al Real Madrid, pero Old Trafford pasó a admirar a un nuevo héroe.

Con los Red devils se llevó tres títulos de la Liga Premier Inglesa, la Copa FA y la Liga de Campeones de Europa en 2008, el mismo año en que ganó su primer Balón de Oro.

Ronaldo cambió al Manchester por el Madrid en 2009 por un precio récord en ese entonces —el cuadro merengue desembolosó 131 millones de dólares por él. Desde que se unió al Real, Ronaldo ha sido prolífico enfrente de la portería, al promediar más de un gol por partido para los nueve veces campeones europeos.

En la temporada 2010-11, el luso logró su mejor marca goleadora en La Liga con 40 tantos, —aunque Lionel Messi lo superó en la siguiente temporada con 50—, y un año después consiguió su primera corona con los blancos.

En diciembre pasado, Ronaldo se convirtió en el cuarto mejor goleador del Real Madrid al marcar 165 goles en 151 encuentros, rebasando al mexicano Hugo Sánchez; ahora solo tiene que superar a Raúl González, que llegó a 228 goles, Alfredo di Stéfano (216) y Carlos Alonso Santillana (186).

Devorador de récords es el madridista que menos partidos necesitó, 92, para alcanzar el centenar de goles en la Liga española, el primer futbolista en la historia de la Liga que consiguió marcar a todos los equipos a los que se enfrentó en una temporada y el único que marcó en seis clásicos consecutivos en Barcelona.

El crecimiento de Cristiano Ronaldo en más de una década lo ha consolidado, junto al recientemente desaparecido Eusébio da Silva Ferreira, como el futbolista más importante de la historia de Portugal, y sobre sus hombros descansan grandes expectativas rumbo al Mundial de Brasil 2014.

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