México corre lento por inversiones
La falta de reformas estructurales en México, las pugnas de poder en el Poder Legislativo y las políticas económicas y sociales inadecuadas frenarán el avance del país como un jugador competitivo por atraer inversión extranjera directa (IED) en América Latina en los próximos años, advirtieron expertos.
La prueba de políticas públicas bien aplicadas es Brasil, que el año pasado logró colocarse como el país más atractivo para la IED en América Latina al captar 34,585 millones de dólares (mdd), 84% más que el año previo, y por arriba de los 23,230 mdd que captó México, según el reporte de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
“La economía brasileña ha venido ganando una muy buena reputación en los últimos años, las expectativas que genera son bastante positivas, mientras que las expectativas que genera la economía mexicana no son tan favorables o tan positivas”, afirmó en entrevista el subdirector de Estudios Económicos de Ixe Grupo Financiero, Luis Flores.
Recientemente Brasil obtuvo el grado de inversión por parte de la calificadora de riesgo crediticio Standard & Poor’s, lo que para diversos analistas significa un mejor panorama de atracción de inversiones tanto de portafolio como de inversión productiva.
Mientras que la situación que atraviesa México es de “inestabilidad” económica, política y social, con grandes discursos pero sin acciones concretas, consideró por su parte el catedrático de la Universidad Panamericana (UP), Mario Cortés.
Por años, la iniciativa privada y el ejecutivo han coincidido en la necesidad de que el país lleve a cabo reformas estructurales en los sectores fiscal, energético y laboral, pero la falta de consensos en el poder legislativo han evitado que se logren avances significativos.
A la fecha, el país se encuentra inmerso en una discusión para llevar a cabo cambios en la forma en que opera Pemex y buscar nuevas formas de hacerle llegar más recursos a la paraestatal para exploración y producción.
“Llevamos ya año y medio de la actual administración y no hemos visto resultados, al contrario, pienso que estamos empantanándonos más en los dimes y diretes de los aspectos políticos y en estas rencillas caciquiles que tenemos con los representantes políticos que tenemos en este momento en el país”, alertó Cortés.
El experto en economía indicó que estos factores influyen en el ánimo de los inversionistas, que aún cuando pueden estar en disposición de traer sus recursos a México, se frenan ante la situación que ven.
“Los flujos de inversión que pueden estar disponibles para México, creo que están esperando que se den los avances importantes en las reformas estructurales”, consideró en entrevista por separado el subdirector de Estudios Económicos de Scotiabank Inverlat, Mario Correa.
La Secretaría de Hacienda estimó que la economía mexicana crecerá este año apenas un 2.8% ante un escenario internacional peor de lo previsto en un principio ante los nubarrones en el horizonte de la economía de Estados Unidos.
