El candidato al Tesoro evadió impuestos
El hombre designado por el presidente electo Barack Obama para encabezar el departamento del Tesoro y dirigir el rescate económico de Estados Unidos reveló el martes que no pagó 34,000 dólares en impuestos entre el 2001 y el 2004.
El reconocimiento que Timothy Geithner hizo en público fue un contratiempo de última hora, que los demócratas en el Senado trataron de hacer a un lado al considerarlo un tropiezo menor en un camino sin complicaciones hacia la ratificación.
Geithner pagó la mayor parte de los impuestos adeudados apenas unos días antes de que Obama lo designara en noviembre, de acuerdo con documentos divulgados por el Comité de Finanzas del Senado. La otra parte de la deuda en impuestos la pagó en el 2006, después de que la oficina de recaudación fiscal le envió la cuenta.
La deuda aún sin saldar con el fisco fue descubierta por el equipo de transición de Obama cuando investigaba los antecedentes de Geithner. El equipo del presidente electo comunicó el asunto a los senadores el 5 de diciembre.
El presidente del Comité de Finanzas, Max Baucus, confió en que Geithner pueda ser ratificado el 20 de enero, cuando Obama asuma la presidencia.
"Esos errores no fueron intencionales; fueron errores honestos", explicó Baucus después que él y otros miembros del comité se reunieron el martes con Geithner en privado.
Entre los senadores republicanos, de quienes podrían esperarse mayores objeciones, no hubo una reacción inmediata.
Luego de la reunión de Geithner con los senadores, el comité difundió 30 páginas de documentos que detallan sus errores fiscales, y también que llegó a contratar a una ama de llaves cuyo permiso para trabajar como inmigrante venció brevemente en el 2005.
El líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, consideró los hechos como "unos cuantos problemitas" y dijo que su impacto no le preocupaba "en absoluto".
Obama reiteró su respaldo al nominado.
"Ha dedicado su trayectoria a nuestro país y servido con honor, inteligencia y distinción", dijo el próximo vocero de la Casa Blanca, Robert Gibbs. "Ese servicio no puede ser empañado por errores honestos, que, al enterarse de ellos, rápidamente puso manos a la obra para solucionarlos".
Geithner, que dejó la presidencia del Banco de la Reserva Federal de Nueva York para ser el secretario del Tesoro de Obama, dijo a funcionarios del equipo de transición y a senadores que desconocía la deuda fiscal originada cuando trabajó por cuenta propia para el Fondo Monetario Internacional.
Geithner y sus partidarios han dicho que su error es común entre las personas contratadas por organismos internacionales que no pagan los impuestos a la Seguridad Social que le corresponden al empleado. Geithner le dijo al equipo de Obama y a los senadores que un contador había revisado sus declaraciones fiscales después de que Geithner las preparó y no descubrió el problema.
Sin embargo, algunos expertos fiscales dijeron que esa omisión no es tan común.
Tom Ochsenschlager, vicepresidente de impuestos para el Instituto Estadounidense de Contadores Públicos Certificados, dijo que sería difícil para alguien que prepara una devolución de impuestos para una persona auto empleada el omitir los renglones de la Seguridad Social y el servicio Medicare.
"Es un error tan básico que me pregunto si realmente estamos al tanto de todos los hechos", dijo Ochsenschlager con relación a la situación de Geithner.
Este dijo también que desconocía que la ama de llaves, a la que le pagó en el 2004 y el 2005, no tenía permiso laboral vigente como inmigrante en los últimos tres meses en que trabajó para él, de acuerdo con los documentos.
En tanto, varios senadores demócratas le ofrecieron apoyo a Geithner. "Tim llegó al comité, admitió que había cometido unos errores y estaba muy arrepentido", dijo Charles E. Schumer en un comunicado. "En mi opinión, esos errores no lo descalifican de ninguna manera".
Geithner es el segundo nominado al gabinete de Obama que suscita controversia. El gobernador de Nuevo México, Bill Richardson, rechazó el 4 de enero ser el secretario de Comercio debido a una investigación federal sobre un contrato del gobierno del estado.
