El petróleo cae a los 68.67 dólares
Los precios del petróleo cayeron el miércoles debido a que un fortalecimiento del dólar y un alza en los inventarios de gasolina de Estados Unidos pesaron más que las preocupaciones acerca del suministro de Nigeria.
El crudo estadounidense cerró con una baja de 57 centavos, a 68.67 dólares por barril, revirtiendo sus ganancias previas.
Las existencias de gasolina de Estados Unidos crecieron en 3.9 millones de barriles en la semana finalizada el 19 de junio, muy por encima de los pronósticos de los analistas, debido a un aumento en la producción de las refinerías, en medio de las vacaciones del verano.
Los inventarios de destilados alcanzaron su nivel más alto en 10 años, mientras que las existencias de crudo mostraron una fuerte caída.
"Los futuros del crudo están cayendo nuevamente por el dólar más alto", dijo Mark Waggoner, presidente de Excel Futures de Huntington Beach, en California.
"Los datos sobre inventarios de la EIA también mostraron grandes incrementos en los inventarios de gasolina y destilados y ello está arrastrando al crudo a la baja", agregó.
El optimismo acerca de una posible recuperación económica que aumentaría la débil demanda de los combustibles ha impulsado a los precios del petróleo desde un nivel inferior a los 40 dólares el barril.
Sin embargo, las importaciones de crudo de Japón, el tercer mayor consumidor mundial, cayeron en mayo un 18.8% respecto a las del mismo mes del año pasado, de acuerdo a datos del Gobierno.
Datos de la EIA mostraron que la demanda total de Estados Unidos descendió un 6.6% en las cuatro semanas finalizadas el 19 de junio, al comparársela con los niveles de un año atrás.
Múltiples ataques de militantes contra oleoductos e instalaciones petroleras en el Delta del Níger han obligado recientemente a interrumpir producción en instalaciones operadas por Agip, Chevron y Royal Dutch Shell, lo que ha suscitado preocupación por el suministro.
Un funcionario de alto rango afirmó que el jueves el presidente de Nigeria propondrá un programa de amnistía de 60 días para los militantes del Delta del Níger, en un esfuerzo por poner fin a años de ataques contra la mayor industria de petróleo y gas de Africa.
Los operadores también estaban atentos a las mayores manifestaciones civiles en 30 años en Irán, el quinto exportador mundial de petróleo, por una polémica elección presidencial.
