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La justicia, a prueba en Wall Street

El juicio en contra de dos gestores de fondos de cobertura de Bear Stearns comenzará esta semana; según los expertos, será difícil para el Gobierno de EU lograr atrapar a más causantes de la crisis.
lun 12 octubre 2009 06:01 AM
Ralph Cioffi y Matthew Tannin, ex empleados de Bear Stearns, iniciarán su juicio el 13 de octubre. (Foto: AP)
bear-stearns-ap.jpg (Foto: AP)

A pesar de todas las acusaciones para encontrar a quién culpar de la peor crisis financiera desde la Gran Depresión, sólo dos jugadores prominentes enfrentan cargos criminales. Aunque el caso contra ellos es convincente y el Gobierno estadounidense quiere dar el ejemplo con ellos, los expertos legales dicen que será muy difícil atrapar a cualquier otro.

Ralph Cioffi y Matthew Tannin, ambos ex gestores de fondos de cobertura en Bear Stearns, son acusados de haber creado una visión demasiado optimista en sus portafolios , aunque "los acusados creían que los fondos estaban en condiciones graves y en riesgo de un colapso", según las acusaciones. 

Los fiscales culparon a Cioffi y a Tannin por haber causado que los inversionistas de Bear Stearns perdieran más de 1,000 millones de dólares, alegando que su comportamiento fraudulento llevó al colapso de sus fondos de cobertura, y por consecuencia, de Bear Stearns. Ambos se declararon inocentes y salieron libres por fianza: 4 millones de dólares para Cioffi y 1.5 millones de dólares para Tannin.

El juicio está programado para comenzar el 13 de octubre en la Corte de Distrito de Brooklyn, Nueva York. Cioffi y Tannin podrían enfrentar cada uno 20 años si se comprueba fraude de valores.

Cioffi podría tener que cumplir otros 20 años por los cargos de tráfico de información confidencial, por haber sacado dos millones de dólares de su propio dinero de un fondo de bajo desempeño de Bear Stearns y por haberlo puesto en otro fondo en el que "él tenía responsabilidades de supervisión", según las acusaciones.

Un vocero de la defensa legal de Tannin se negó a dar comentarios. Los abogados de Cioffi no respondieron ningún mensaje.

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Dando el ejemplo

"No se si se trata de un caso de prueba, pero ciertamente pondrá a prueba la teoría del Gobierno de ir tras acusados de Wall Street, quienes, según el gobierno, no fueron honestos con respecto a los prospectos futuros de su fondo", dijo Robert Mintz, un ex fiscal federal que atiende casos de cuello blanco en el despacho McCarter & English.

Ken Springer, ex agente del FBI, analista certificado de fraudes y presidente de la empresa de consultoría Corporate Resolutions, fue más conciso: "Creo que el Gobierno está pintando una raya en la arena y creo que darán el ejemplo".

Springer describió esto como "un caso crucial para que el Gobierno muestre que este tipo de comportamiento no es aceptable", y dijo que la evidencia de las autoridades es "convincente".

Los dos defensores presentaron sus fondos de cobertura, que representaban un total de 1,400 millones de dólares en 2006, como inversiones de "bajo riesgo" en obligaciones de deuda garantizadas y calificadas como AAA, respaldadas por un conjunto de valores como hipotecas, según los abogados del Gobierno.

Se alega que en la primavera de 2007, ambos hombres tenían conversaciones privadas sobre el declive de los prospectos de sus fondos y sobre la inminente caída. Tannin dijo a Cioffi que "el mercado subprime se veía muy mal", y sugirió que "cerraran los fondos de inmediato", según las acusaciones.

"A pesar de su opinión contraria, los acusados hicieron que los inversionistas y acreedores creyeran que, sin importar los retos que presentaba el mercado, los fondos seguirían generando un valor positivo neto de los activos", redactaron los acusadores en un comunicado de prensa cuando se presentó la acusación, el 19 de junio de 2008.

El 22 de septiembre, los fiscales acusaron a Cioffi, residente de Nueva Jersey, de haber viajado a Florida para intentar recuperar documentos de Busey Bank con base en Fort Myers, donde había intentado obtener una línea de crédito de 4.25 millones de dólares. Sus abogados niegan que haya intentado obtener los documentos en medio de una citación federal, como alegan las acusaciones.

Ken Rubinstein, un abogado de protección de activos en la empresa neoyorquina Rubinstein & Rubinstein, también cree que los fiscales tienen un caso fuerte contra Cioffi y Tannin, pero que ésta es una situación única.

"Ellos son las únicas dos personas que han salido a la luz porque es el único caso donde los hechos son lo suficientemente claros a favor del Gobierno", dijo.

¿Fraudulentos o sólo tontos?

Aunque Cioffi y Tannin son los únicos gestores de fondos de cobertura que fueron acusados de comportamiento fraudulento que llevó al colapso, nadie está alegando que ellos dos solos hayan hecho que Wall Street colapsara.

"Creo que queda claro que ha habido mucho fraude en el sistema", dijo Dick Bove, analista bancario en Rochdale Securities. "Su sistema es multifacético, y en cada fase hubo gente que decidió no tomar la decisión correcta, lo cual es un acto criminal. En todos lados hubo excesos, y probablemente el mayor de todos fue por parte del Gobierno, porque tenía la obligación (de prevenir el fraude)".

A pesar de todos los errores de cuello blanco que ocasionaron la caída del mercado en 2007, Bove dijo que hacer acusaciones por actos fraudulentos y por actos criminales es algo complejo y difícil.

"Debería de haber una investigación intensiva para husmear entre la gente que estaba haciendo este tipo de cosas, y no sé cuál pueda ser el riesgo o la recompensa", dijo. "Implicará mucho trabajo darnos cuenta de quiénes fueron".

Cada vez que los investigadores encuentran a un par de sospechosos, como Cioffi y Tannin, puede ser difícil probar que tenían la intención de engañar deliberadamente a los inversionistas, o si simplemente estaban cometiendo errores tontos.

De esta forma, los inversionistas en los fondos de cobertura son tan responsables por la desaparición como los gestores de los portafolios, dijo David Wyss, economista en jefe en Standard & Poor's.

"Nadie les apuntó con una pistola ni les dijo que compraran hipotecas subprime", dijo. "Es una combinación de imbecilidad y exceso de confianza, e infortunadamente, ambas son epidemias nacionales".

Pero, incluso si la mayor parte del comportamiento previo a la caída en Wall Street puede atribuirse a la falta de diligencia más que a un fraude deliberado, Bove dijo que eso no justifica nada.

"¿Está mal? Claro que está muy mal", dijo. "¿Alguien va a hacer algo al respecto? Honestamente no lo creo".

"Yo creo que al final, la defensa argumentará que algunas de las mentes más grandes en la economía no fueron capaces de predecir la recesión, así que ¿por qué habrían de culpar a estas dos personas?", dijo Mintz, el abogado en McCarter & English.

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