Banxico deja tasa de referencia en 4.5%
El Banco de México (Banxico) mantuvo sin cambios la Tasa de Interés Interbancaria a un día, situándose en 4.5%, sin embargo, dejó la puerta abierta para futuros cambios ante el aumento previsible en la inflación por las modificaciones fiscales que apruebe el Congreso de la Unión.
"Las acciones futuras serán congruentes con el balance de riesgos. Ello con el propósito de alcanzar la meta de inflación del 3% anual", dijo el Banxico en su reporte mensual de política monetaria.
Durante el año, el Banco Central ha bajado la tasa de interés desde el 8.25% al 4.5%.
El Banco Central espera que los indicadores de la actividad industrial, la confianza del consumidor y el empleo reafirmen la recuperación del país, en sus cifras para el segundo semestre, para que la actividad en su conjunto muestre aumentos de al menos 3% en el tercer trimestre, con respecto al trimestre inmediato anterior.
La economía mexicana tuvo una caída de 9.2% en el primer semestre del año.
Impacto inflacionario
El secretario de Hacienda, Agustín Carstens, mencionó en días recientes que el paquete fiscal propuesto para el próximo año podría incidir en la inflación en un punto porcentual, por la implementación de nuevos gravámenes y el incremento en la tasa de algunos otros.
Con esta reforma fiscal, el Gobierno mexicano busca en parte tapar el boquete presupuestario para el próximo año, de más de 300,000 millones de presos, producto de menores ingresos petroleros y tributarios.
Algunos analistas privados prevén una situación más grave.
El paquete económico presentado por Felipe Calderón podría generar una inflación cercana al 6% para el próximo año, tomando en cuenta los cambios fiscales que prevén aumentos en las tasas de algunos impuestos, la creación del gravamen al consumo del 2% y el alza de precios y tarifas del sector público, dijo en la semana la calificadora Moody´s.
La inflación medida a tasa anual se desaceleró a un 4.89% hasta septiembre, según cifras del Banco de México.
La inflación prevista para el próximo año, de aprobarse los cambios fiscales, "generará presiones para que la política monetaria empiece la reversión del ciclo de relajamiento mucho antes de que la economía fortalezca su recuperación", dijo Moody´s.
Esto de acuerdo con el mandato constitucional anti-inflacionario del Banco de México.
La implementación de esta política resultaría inefectiva, ya que el repunte inflacionario no será causado por un fenómeno monetario (presión de demanda), pero sí atentaría contra la recuperación del país, según la calificadora.
En caso de darse una restricción monetaria a inicios del próximo año fiscal, éstas serían el resultado de las presiones de un mercado "miope y cortoplacista" más que de una medida con las causales reales de la inflación, agregó.
Las autoridades mexicanas esperan un crecimiento económico de 3% para el 2010, desde el posible estancamiento cercano al 7% de este año, por los efectos negativos de la recesión económica en la que se ha sumido.
