Obama propone recortes frente al déficit
El presidente estadounidense, Barack Obama, está pidiendo a las agencias del Gobierno que definan planes de recortes por un 5% en una serie de programas, en un intento por mantener controlado el gasto y mostrar disciplina fiscal, dijo el martes la Casa Blanca.
"Le estamos pidiendo a cada agencia que desarrolle una lista del 5% de sus programas de peor desempeño, medido según el impacto en mejorar la misión de la agencia", dijo Peter Orszag, director de presupuesto de la Casa Blanca, al instituto de estudios Centro para el Progreso Estadounidense.
"Además, para asegurarnos de que podamos cumplir con el encargo del presidente de congelar las agencias no destinadas a seguridad sin cortar el financiamiento a las áreas prioritarias, le estamos pidiendo a las agencias que no están en el sector de seguridad que especifiquen cómo reducirán sus presupuestos en un 5.0%", afirmó.
Los mercados financieros han sido sacudidos por los temores sobre la sostenibilidad de los niveles de deuda de los Gobiernos en Europa, y aunque Estados Unidos no ha corrido la misma suerte hasta el momento, las autoridades del país temen que pueda haber un contagio.
El déficit presupuestario del país llegó hasta los 1.4 billones de dólares el año pasado, y se estima que este año trepará hasta los 1.6 billones.
Además, los estadounidenses temen que el déficit récord del país pueda forzar alzas en los impuestos en el futuro, y estos temores han complicado los esfuerzos de Obama para asegurar una recuperación sólida desde la peor recesión en Estados Unidos tras la crisis financiera del 2008.
Una nueva ley para ampliar los beneficios por desempleo, aumentar los impuestos a los fondos de inversión y ampliar las exenciones fiscales a las empresas y personas fue puesta en espera en la Cámara de Representantes para ganar el apoyo de los demócratas conservadores en materia fiscal. La iniciativa aumentaría el déficit en 31,000 millones.
La Casa Blanca respalda cualquier medida que amplíe la ayuda por desempleo y alivie las complicaciones financieras de los estados carentes de liquidez.
Orszag dijo que el juego entre alentar el mercado laboral o reducir el déficit es una opción falsa, ya que el Gobierno debe estimular el empleo en el corto plazo y frenar el déficit presupuestario una vez que el crecimiento en el empleo estuviese asegurado.
Los republicanos han aprovechado el abultado déficit presupuestario para atacar el manejo económico de Obama en un año electoral en el que buscarán arrebatar el control del Congreso a los demócratas.
