El precio del petróleo va en picada
El precio del crudo estadounidense cayó fuerte el martes, bajando por segunda sesión seguida y anotando el primer declive mensual desde mayo debido a preocupaciones sobre el titubeante crecimiento económico.
La débil demanda y rebosantes inventarios de crudo presionaron también a los futuros de crudo y de gasolina.
El barril de crudo estadounidense para entrega en octubre bajó 2.78 dólares, o un 3.72%, para cerrar a 71.92 dólares por barril, subiendo hasta 74.73 dólares y cayendo hasta 71.53 dólares en la negociación posterior al cierre del mercado.
Para el mes, el crudo estadounidense bajó 7.03 dólares el barril, o un 8.9%, la mayor pérdida porcentual mensual desde mayo, cuando los precios tocaron un mínimo de 2010 de 64.24 dólares el 20 de mayo, el valor más débil de pronta entrega desde julio de 2009.
El martes, el crudo Brent de Londres para octubre perdió 1.96 dólares, a 74.64 dólares por barril.
"La volatilidad de fin de mes ha derribado a los futuros de crudo hoy (martes), con el vencimiento de los futuros de productos refinados agregando presión", dijo Mark Waggoner, presidente de Excel Futures en Bend, Oregon.
El mercado se mantuvo a la espera de los datos semanales de inventarios estadounidenses del Instituto Americano del Petróleo (API, por su sigla en ingles), que tras el cierre del mercado informó un alza mayor a la esperada.
El reporte del API mostró que los inventarios de crudo aumentaron la semana pasada en 4.8 millones de barriles, muy por encima del alza proyectada por analistas sondeados por Reuters de 1.3 millones de barriles.
Sumándose a la perspectiva a la baja, un reporte del Instituto de Gerencia y Abastecimiento mostró el martes que la actividad económica de la región central de Estados Unidos se desaceleró en agosto.
Operadores se mantenían cautos ante la eventual interrupción de suministros durante la temporada de huracanes en el océano Atlántico.
El poderoso huracán Earl avanzaba el martes hacia la costa este de Estados Unidos y podría tocar la densamente poblada área costera entre Carolina del Norte y Nueva Inglaterra, dijo el Centro Nacional de Huracanes (CNH).
Hasta el momento, modelos por computadora no muestran que las tormentas representen una amenaza para las operaciones de energía en el Golfo de México.
