Cumbre en Cancún aborda brecha económica
Una nueva ronda negociaciones de Naciones Unidas sobre cambio climático comienza el lunes con una reunión de casi 200 países en México, donde esperan lograr un acuerdo sobre un ajustado espectro de temas que dividen a las economías ricas y pobres.
La conferencia de dos semanas en la ciudad turística de Cancún busca acordar sobre fondos y posturas para preservar las selvas y preparar a las naciones para un mundo más cálido.
También buscará formalizar las actuales metas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
La cumbre está muy por debajo de los niveles del encuentro en Copenhague el año pasado, que buscaba un nuevo acuerdo sobre cambio climático pero terminó con un pacto no vinculante rechazado por una serie de países en desarrollo.
Las negociaciones de la ONU han generado enconadas disputas entre los dos grandes contaminantes del mundo, Estados Unidos y China, con demandas estadounidenses para que el Gobierno de Beijing reduzca sus emisiones de gases que se asemejan a la presión sobre el gigante asiático en temas de libre comercio y derechos humanos.
En vísperas de las conversaciones, el presidente mexicano, Felipe Calderón, destacó las oportunidades económicas para luchar contra el cambio climático, buscando terminar con la desconfianza vista en la cumbre anterior.
"Este dilema entre proteger el medio ambiente y luchar contra la pobreza, entre combatir el cambio climático y el crecimiento económico, es falso", dijo en declaraciones traducidas del inglés, destacando la energía renovable durante una inauguración de una turbina de viento que abastecerá al hotel donde se realiza la conferencia.
Calderón dijo que las negociaciones se centrarán en los preparativos para un mundo más cálido, una preocupación central para las naciones más pobres.
"Básicamente, lo que vamos a discutir es la adaptación", manifestó.
Aquel comentario desentonó con los negociadores de la Unión Europea, quienes dijeron que las conversaciones también deben buscar compromisos más severos a los actuales pactos existentes, que también deben provenir de las naciones en desarrollo.
"Buscaremos tomar una serie limitada de decisiones en Cancún. Esperamos que despejen el camino", dijo el domingo Artur Runge-Metzger, un alto negociador de la Unión Europea.
El principal objetivo de la cumbre es lograr un acuerdo más severo contra el cambio climático que suceda al Protocolo de Kioto, cuya actual ronda termina en el 2012, a fin de detener los efectos del calentamiento global.
En el peor escenario del cambio climático, el promedio de la temperatura mundial podría subir en 4 grados centígrados para la década del 2060, y ello requerirá una inversión anual de 270,000 millones de dólares sólo para contener el incremento de los niveles marítimos, sugirieron estudios el domingo.
