Publicidad

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

El petróleo genera un dilema económico

El alza en precios significa mayores ingresos a las finanzas públicas mexicanas, dicen economistas; sin embargo, el crecimiento económico del país podría enfrentar presiones en materia de inflación.
jue 24 febrero 2011 06:16 PM
Pemex prevé incrementar su producción de crudo a 2.8 millones de barriles diarios en 2013. (Foto: Cortesía Pemex)
Pemex plataforma (Foto: Cortesía Pemex)

En medio del creciente temor mundial por el alza en el precio del petróleo como consecuencia de la crisis política en Libia, el escenario para México es de doble vía, destacan economistas.

Mientras que los altos precios del petróleo le generan mayores ingresos al Gobierno mexicano, que le permiten mantener bajo su déficit fiscal en un entorno global de desequilibrios en las finanzas públicas, pero también genera temor a una inflación importada, un eventual aumento en la gasolina y un tipo de cambio que se ubique temporalmente arriba de 12.20 pesos por dólar.

Esta situación "la vemos de carácter temporal y no nos adelantaríamos, necesariamente, a prever un impacto significativo en la actividad y prospectos económicos de México", asegura Joel Virgen, coordinador de Análisis Macroeconómico y de Mercados de Banamex Citi.

Este jueves, el, barril de la mezcla mexicana de exportación cerró la jornada cotizando en 97.25 dólares, lo que significa una diferencia de más de 30 dólares contra el estimado de 65.40 dólares por cada tonel que aprobó el Congreso de la Unión en el Paquete Económico 2011.

En tanto, los mercados financieros se encuentran temerosos de las consecuencias que el alza en los precios referenciales del crudo generen en el incipiente escenario de la recuperación económica mundial.

El temor a que la escalada en el precio del hidrocarburo continúe genera un escenario de incertidumbre entre los inversionistas internacionales, que ha presionado a la baja a las Bolsas de valores y los tipos de cambio por el miedo de una creciente inflación que obligue a subir tasas de interés, destacan economistas de Moody's Analytics, Banamex e Ixe Grupo Financiero.

Publicidad

Para México, una de las principales interrogantes está en si la Secretaria de Hacienda va a ajustar al alza el precio de la gasolina.

"Pensamos que dada esta volatilidad van a ‘pagar por ver', porque casi todo el impacto ha sido derivado del nerviosismo, o de expectativas, más que de un factor significativo en la oferta que estamos viendo en el mercado", agrega el analista de Banamex.

Alfredo Coutiño, director para América Latina de Moody's Analytics, estima que México captará mayores ingresos, pero también resentirá una mayor inflación, pero no tan alta como debería suceder sin la revaluación del peso que anticipa .

De hecho, estima que el tipo de cambio se moverá hacia 11.50 pesos por dólar, por un mayor flujo de capital al país, aunque en el corto plazo se mantendrá arriba de 12 pesos y reconoce que de mantenerse a altos los precios del petróleo, la economía del mundo podría entrar en un proceso de desaceleración marcada que tendría efecto indirecto en México, a través de una menor demanda externa por los productos nacionales.

"Elevados precios del petróleo implican mayor valor en los combustibles, y dado que México importa una gran cantidad de éstos, particularmente gasolina, eso afecta el precio en el mercado nacional y tendría un efecto sobre la inflación, que posiblemente no sería compensando por la revaluación del peso. De darse ese escenario, el efecto se estaría viendo en los primeros meses del año", advirtió.

Las presiones inflacionarias, que inciden en un alza en las tasas de interés, así como en aumentos de insumos relacionados con el petróleo, han generado especial temor en algunos mercados emergentes, cuyas bolsas acumularon en los últimos años avances significativos, añade Carlos Ponce, director general adjunto de Análisis de Ixe Grupo Financiero. 

Aunque el panorama se podría complicar más, el especialista no advierte una razón por la que Banco de México (Banxico) podría optar por subir la tasa de interés de referencia, pues de esa forma se reaccionaría a una inflación importada, y el mismo órgano central ha reconocido que no puede hacer mucho contra ese factor.

El Gobierno tiene margen de al menos un par de semanas para observar cómo se desarrollan los eventos internacionales, sin que ellos se materialice en presiones inflacionarias de carácter permanente, agrega Joel Virgen.

"El ambiente es de incertidumbre, los riesgos geopolíticos están eclipsando alentadoras cifras de recuperación económica global y el nerviosismo ha permeado más la parte financiera; las próximas dos semanas serían importantes para conocer el impacto que tendrían los altos precios del petróleo", mencionó.

Dinero Inteligente

Únete a Dinero Inteligente. El newsletter con consejos para cuidar tus finanzas.

Publicidad
Publicidad