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CEOs en EU: optimistas pero con reservas

Las empresas confían en que la economía de EU avanza y buscan expandir sus planes de contratación; sin embargo, los altos precios del combustible y la deuda del país aún les quitan el sueño.
mar 17 mayo 2011 06:03 AM
La tenencia de bonos del Gobierno estadounidense creció a 1,402 billones de dólares. (Foto: Photos to Go)
economia crecimiento caidas (Foto: Photos to Go)

Los líderes de varios negocios confían en que la economía de Estados Unidos está mejorando, e incluso dijeron estar contratando a más empleados como prueba de ello. Pero según un sondeo realizado en las últimas semanas por CNNMoney a 24 líderes empresariales, los presidentes ejecutivos aún están nerviosos por muchas cosas, sobre todo por los altos precios del combustible y por los problemas de deuda en Estados Unidos y en Europa.

Cada presidente ejecutivo tuvo que responder si se sentía más confiado ahora en comparación con el año pasado; cuáles eran los principales riesgos que enfrentan la economía y los mercados y qué creía que podría hacer Washington para ayudar a los negocios y a la economía, así como los planes de contratación de sus empresas.

Todos los presidentes ejecutivos, excepto uno, dijeron sentirse más confiados con la economía, y sólo uno dijo que su empresa no tenía entre sus planes el aumento en las contrataciones.

En cuanto a los riesgos, casi la mitad de los encuestados citó específicamente el alto precio de la gasolina y de las materias primas, o la inflación, como una preocupación.

"El aumento en el precio de la gasolina y del diesel está quitando un fuerte poder de compra a los clientes. Esta inflación en particular no distingue entre clases económicas, pero sí afecta más a las personas con salarios más bajos", dijo David Haffner, presidente ejecutivo de Leggett & Platto, un fabricante de muebles de Carthage, Missouri.

Aunque la caída reciente en el precio del petróleo podría ofrecer algo de alivio, los presidentes ejecutivos dijeron que aún están preocupados por el aumento de los precios de la gasolina , que siguen considerablemente altos en comparación con años anteriores.

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Y esto seguirá lastimando a la clase media.

"Podemos verlo así", dijo Lanham Naiper, presidente ejecutivo de la compañía de computación 'nube' en San Antonio, Rackspace Hosting. "Una persona promedio conduce 24,000 kilómetros al año. Eso son 4,400 litros de gasolina. Si la gasolina aumenta 2 dólares, son 2,000 dólares después de impuestos, y para una persona que gana 50,000 dólares al año, eso es mucho dinero.

Las preocupaciones en torno al déficit presupuestal de Estados Unidos también estaban entre los riesgos más mencionados.

"Hasta que el gobierno federal atienda con seriedad los programas de ayuda social y el presupuesto militar, este país mantendrá serios déficits", dijo Ted Peters, presidente ejecutivo de Bryn Mawr Bank, un prestamista en Pensilvania que no aceptó ningún fondo de rescate.  

La mayoría de los presidentes ejecutivos lucía precavidamente optimista de que el gobierno finalmente accediera a la implementación de un plan para hacer frente a varios retos económicos a largo plazo. Pero Doug Ober, presidente ejecutivo de Adams Express, un fondo de inversión cerrado en Baltimore que invierte en acciones estadounidenses, no está tan seguro.

Es el único entrevistado que dijo sentirse menos confiado hoy que hace un año. "Si este creciente déficit no se arregla, los mercados de bonos sucumbirán y el dólar ya no será la moneda de la reserva mundial", dijo Ober.

Mohamed El-Erian, presidente ejecutivo de la casa de inversión PIMCO, ha criticado fuertemente las políticas fiscales en Washington. Quiere que el Congreso ataque el déficit, pero dijo que el empleo era la prioridad del Congreso y de la Casa Blanca.

El-Erian dijo que Washington necesita "ofrecer una visión clara, operativa y bipartidista del panorama económico de Estados Unidos con tres componentes clave: combatir un enorme problema de desempleo que se está volviendo más estructural y prolongado en naturaleza; una reforma fiscal a mediano plazo y pasos para restaurar la vitalidad y estimular la competitividad internacional de la economía".

Otros presidentes ejecutivos también piden que Washington trabaje más duro en la creación de empleos.

Chris Loughlin, presidente ejecutivo de Travelzoo, sitio de viajes en línea con base en Nueva York, dijo que si el gobierno se concentrara en energías alternativas, podría ayudar a resolver dos problemas clave: "Hay que invertir en investigación y desarrollo, sobre todo en el desarrollo de combustibles", dijo. "Esto generará décadas de innovación y empleos, y es algo inteligente".

Pero hay ciertos debates en torno al papel que debería tener el gobierno.

Dick Evans, presidente ejecutivo de Cullen/Frost Bankers, una compañía financiera con base en San Antonio, Texas -que tampoco tomó dinero del Programa de Alivio para Activos en Problemas (TARP, por sus siglas en inglés)- dijo directamente que Washington debería "quitarse del camino".

Evans, al igual que otros presidentes ejecutivos, expresó su preocupación por la propuesta de ley a la reforma financiera Dodd-Frank. Hay quienes sienten que esta propuesta ejemplifica la forma en la que Washington genera problemas con regulaciones onerosas y poco claras.

Y algunos presidentes ejecutivos dijeron que los legisladores podrían ayudar a crear empleos reformando el código fiscal del país.

Aunque la mayoría de los presidentes ejecutivos apoyó impuestos más bajos para los negocios, varios indicaron que no tendrían problemas con un aumento en los impuestos individuales de sus propios ingresos.

En respuesta a la pregunta de lo que podría hacer Washington para ayudar a los negocios, Tom Toomey, presidente ejecutivo de UDR (un fondo de inversión en bienes raíces con base en Denver) dijo que los legisladores deberían "reducir las tasas de impuestos corporativos y aumentar los impuestos de los más ricos".

Toomey también dijo que quería que los políticos redujeran el "gasto gubernamental a nivel general e implementaran un plan a largo plazo para reducir todos los elementos del gasto en ayuda social".

Barbara Morrison, presidenta ejecutiva de TMC, un pequeño prestamista en San Francisco, coincide con Toomey en la cuestión fiscal.

"Decir que el aumento a las exenciones fiscales para los individuos que ganan más de 250,000 dólares al año es un programa de creación de empleos, es algo difícil de justificar. Los pequeños negocios crean empleos. Dar al presidente ejecutivo una exención fiscal no influye en las contrataciones", dijo.

Michael McKean, presidente ejecutivo de Knowland Group, una compañía de mercadeo para la industria hotelera con base en Washington, también pidió que el gobierno se concentrara más en los pequeños negocios.

Dijo que los políticos necesitan "hacer un mejor trabajo ayudando a los dueños de pequeños y medianos negocios y a las comunidades que empiezan. Estos dos segmentos generan la mayor parte del crecimiento en nuestra economía y tienen poca representación en Washington".

Afortunadamente, los presidentes ejecutivos no parecen estar esperando que Washington resuelva el problema. Casi todos dijeron estar preparados para contratar, y varios dijeron planear expansiones fuertes en su número de empleados para satisfacer la demanda.

Un presidente ejecutivo -que tiene una mejor noción del mercado laboral que el resto- se mostró particularmente optimista. "Al igual que muchos de nuestros clientes, estamos invirtiendo en el futuro y reclutando activamente en todo el mundo", dijo Sal Iannuzzi, CEO del sitio de empleos en línea Monster Worldwide.

Pero los presidentes ejecutivos aún expresan su cautela. Muchos citaron la fragilidad y lentitud de la recuperación, y uno incluso sugirió que era demasiado pronto para que Washington retirara su apoyo a la economía.

"La economía no es lo suficientemente fuerte para recortar los estímulos a corto plazo. Es prudente comenzar un acuerdo con los problemas fiscales a largo plazo, pero es importante que esto se haga adecuadamente para evitar una doble recesión", dijo Fred Tomczyk, presidente ejecutivo de la correduría en línea con base en Omaha, TD Ameritrade.

En otras palabras, los presidentes ejecutivos están tan nerviosos por la volatilidad en el mundo como el resto de nosotros. No sería ninguna sorpresa que los negocios intenten reducir algunos de sus planes de gasto más ambiciosos si la economía global se debilita.

John McAdam, presidente ejecutivo de la compañía de equipo de redes F5 Networks, en Seattle, dijo sentir más confianza en torno a la economía, pero agregó que el problema es que hay una incertidumbre general. "Quizás tomará sólo uno o dos eventos antes de que las carteras se ajusten".

Las opiniones expresadas en esta nota son sólo las de Paul R. La Monica. Además de Time Warner, compañía madre de CNNMoney, y Abbott Laboratories, La Monica no tiene posiciones en ninguna acción individual.

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