El miedo invade a los mercados
La Bolsa de México de Valores (BMV) cayó con fuerza este jueves ante la escalada de temores a que las economías de Estados Unidos y la zona euro caigan en una recesión, en una dura jornada para los mercados globales. El principal índice bursátil, el IPC, se desplomó un 2.36%, a 33,246 puntos, con un volumen de 365.9 millones de acciones negociadas, superior al promedio de mercado.
"Se está confirmando que viene un proceso de desaceleración, todavía no podemos decir que es una recesión, pero para México va a disminuir el crecimiento económico en una manera importante", comentó Rodolfo Navarrete, director de análisis de la casa de bolsa Vector.
Las acciones de la minorista Wal-Mart de México cayeron 0.36%, a 30.47 pesos, mientras que las de la cementera Cemex , una de las mayores del mundo, perdieron un 6.60% y cerraron a 6.37 pesos.
Los papeles de América Móvil -los de mayor peso en el IPC- cayeron un 3.36%, a 14.40 pesos.
"El IPC rompe el valor crítico de los 34,000 puntos. La nueva banda soporte está en 33,650 a 33,000 puntos y la banda de resistencia se ubica en 34,500 a 35,000 puntos", precisó la operadora de fondos Actinver.
En tanto, analistas señalaron que el promedio móvil exponencial de 100 días del IPC está cerca de cruzar debajo de su promedio móvil exponencial de 200 días, un evento que sugiere que el índice podría caer hasta sus mínimos de este mes o incluso experimentar una pérdida mayor.
El temor se ‘come' a Wall Street
Los crecientes temores a otra recesión golpearon el jueves a las acciones estadounidenses, lo que derrumbó a los principales índices y provocó un retorno a las fluctuaciones extremas que los inversores soportaron hace una semana.
Nuevas preocupaciones acerca de la salud de los bancos europeos fijaron el tono antes de la apertura del mercado, y un decepcionante reporte manufacturero en Estados Unidos provocó una espiral a la baja en la que el Dow perdió hasta 528 puntos, provocando una huída hacia activos seguros, como el oro.
El Nasdaq terminó con una pérdida de más del 5%, el Standard & Poor's 500 (S&P 500) bajó más de un 4% y el promedio de acciones líderes Dow Jones perdió más de un 3%.
"¿Vamos a entrar en recesión? La mayoría del mercado esperaba un crecimiento lento y sostenido, pero las estadísticas y la situación financiera aquí y afuera han trastocado esa idea", dijo Richard Weiss, gestor de fondos de American Century Investments, en Mountain View, California.
El promedio industrial Dow Jones cayó 419.63 puntos, o un 3.68%, y cerró a 10,990.58 unidades, mientras que el índice Standard & Poor's 500 declinó 53.24 puntos, o un 4.46%, y terminó a 1,140.65.
El índice Nasdaq Composite perdió 131.05 puntos, o un 5.22%, y cerró a 2,380.43.
Las pérdidas retomaron el declive de las acciones que empezó a finales de julio y que pareció moderarse en los últimos días. En un indicio preocupante, el volumen fue más fuerte que en los días positivos, con 11,400 millones de títulos cambiando de manos, la cifra más alta en esta semana.
La volatilidad se disparó, con el índice CBOE o VIX -termómetro de la ansiedad de Wall Street- ganando un 38%, a 43.56. Más inversores estaban tomando posiciones de protección contra los declives en el mercado.
Los sectores asociados con el crecimiento fueron duramente golpeados.
Entre los principales lastres del Dow estuvieron los títulos de IBM, que perdieron un 4.5%, a 163.83 dólares, y los papeles de United Technologies, que perdieron un 5.5%, a 68.12 dólares.
En el Nasdaq, las acciones de Oracle cayeron un 8.3%, a 25.19 dólares.
Aumentando el temor a otra recesión, un sondeo sobre la actividad fabril realizado por el Banco de la Reserva Federal de Filadelfia mostró una caída en agosto a su nivel más bajo desde marzo del 2009.
Las acciones de Hewlett-Packard Co se derrumbaron un 6.1% tras informar los resultados trimestrales.
Las acciones de bancos también impulsaron los declives del mercado. El índice bancario KBW perdió un 5.6%.
Por su parte, los economistas de Morgan Stanley redujeron la perspectiva para el crecimiento global y dijeron que Estados Unidos y la zona euro están "peligrosamente cerca de la recesión".
