Entorno global pone en riesgo a bancos
El empeoramiento del entorno económico global podría acentuar los riesgos para la banca mexicana, especialmente en la forma de incrementos en costos crediticios, dijo este viertes la calificadora Fitch Ratings en su reporte 'Perspectivas 2012: Bancos mexicanos - Retos en el camino, pero bien posicionados'. "Si esto ocurre en una magnitud tal que afecte materialmente las utilidades recurrentes o la capacidad de absorción de pérdidas de un banco, esto afectaría calificaciones específicas", señaló la agencia por medio de un comunicado.
Fitch alertó que las calificaciones de bancos con matrices en el extranjero podrían verse afectadas por bajas materiales en la nota de los órganos centrales. Además, las entidades pequeñas pueden resultar afectadas por presiones de fondeo y liquidez.
Para 2012, la agencia prevé un año estable para el sector bancario mexicano, dada la expectativa de que los bancos mantendrán sus principales fundamentos crediticios en esta fase de deterioro del ciclo económico.
"Dependiendo de la extensión y la magnitud de la desaceleración económica, Fitch espera un impacto de bajo a moderado en los indicadores sectoriales de calidad de activos y rentabilidad, pero los índices de solvencia y liquidez deben permanecer relativamente robustos", cita la firma en el texto.
Fitch calcula que el crecimiento de México se desacelerará a 3.7% en 2011 y 3% en 2012. "Las perspectivas de crecimiento de mediano plazo de México siguen siendo relativamente débiles en comparación con pares regionales y otros mercados emergentes".
En niveles de morosidad, la agencia espera que tendrán un ligero cambio en su estabilidad por el impacto del deterioro del entorno sobre los deudores.
"Durante la reciente crisis, los bancos compensaron los bajos márgenes con ganancias de intermediación y luego con menores costos crediticios. Sin embargo, el entorno actual limita las herramientas de los bancos para compensar los márgenes relativamente bajos", dijo Fitch.
Para la calificadora las perspectivas de bajo crecimiento de préstamos en el futuro cercano restringen la capacidad de lograr una mayor eficiencia, mientras que la fuerte competencia hace difícil incrementar los ingresos no financieros.
Además, la volatilidad en los mercados de capitales limita el espacio para buscar ganancias materiales en actividades de información, indicó.
"Un gran reto para los bancos mexicanos es la posible baja de las tasas de interés a corto plazo, la cual podría concretarse en función de la magnitud de la desaceleración", apuntó Fitch.
