Los griegos volcarán su ira en las urnas

Los votantes griegos, airados por la difícil situación económica que viven desde hace años , castigarán el domingo a los partidos tradicionales en unas elecciones de resultado incierto que podrían sumir al país en el caos político y conmocionar a toda la zona del euro.

Lo que está en juego es si Grecia cumplirá con las duras condiciones del enormemente impopular rescate de 130,000 millones de euros concedidos por la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), o si emprenderá un camino que podría terminar con su expulsión del bloque monetario único, con graves consecuencias para otros países periféricos de la UE como España o Italia.

Los salarios y las prestaciones se han recortado , el desempleo está por las nubes y miles de pequeñas empresas se han hundido. Los airados griegos se han inclinado por partidos más pequeños y contrarios al rescate financiero para así castigar a los políticos tradicionales, a los que culpan de la crisis.

Se espera que un récord de entre 8 y 10 partidos entren en el Parlamento y la ira pública hacia los más grandes podría convertir al menos a cuatro pequeños grupos en posibles centros de poder.

Unas 46 millones de personas están convocadas a estas elecciones anticipadas en un clima de fuerte tensión social, y tras las que se prevé una gran fragmentación en el Parlamento, con un gran ascenso de las formaciones contrarias a los planes de ajuste.

Tras la severa crisis en el país, el 85% de los griegos desconfían de los políticos, uno de cada tres no sabe aún por quién votará en estas elecciones, en donde se elegirá a los 300 miembros del llamado Consejo de los Helenos o Parlamento griego.

Los últimos sondeos publicados antes de las elecciones mostraron que el conservador partido Nueva Democracia y el socialista PASOK -que entre ambos dominaron la política del país durante décadas y ahora gobiernan en coalición- obtendrían apenas los votos suficientes para renovar su inestable coalición.

Son los únicos partidos que apoyan el rescate. No se ha permitido la publicación de sondeos desde hace dos semanas, y las encuestadoras advierten de que los resultados podrían ser una sorpresa.

"Hemos votado por ellos desde los años 80 y nos sentimos engañados. Construimos una vida con el paso de los años y ellos la destruyeron de la noche a la mañana. Sus campañas son para idiotas. Votaré por un partido pequeño", afirmó la funcionaria municipal Christina Theodorakou, de 50 años, sobre los dos grandes partidos. Su salario mensual se ha reducido en 500 euros desde que comenzó la crisis.

Su hija Alexandra, una estudiante de enfermería de 18 años, tiene la edad suficiente para votar por primera vez, pero probablemente no acudirá a las urnas: "¿Para qué ir (a votar)? Nadie nos puede prometer un futuro mejor".

Los advenedizos

Con el voto contrario al rescate fragmentado en una serie de grupos advenedizos, se espera que los dos grandes partidos comiencen inmediatamente unas difíciles negociaciones para renovar la coalición, encabezada por Nueva Democracia.

La gran duda es si tendrán escaños suficientes para gobernar o si dependerán de uno o más de los partidos menores que se oponen al rescate.

"Es una de las elecciones más difíciles que hemos tenido que predecir. Días antes de las elecciones, los votantes seguían indecisos y su comportamiento es impredecible", dijo Ilias Nikolakopoulos, de la encuestadora Opinion, un veterano de más de 10 comicios.

Si el líder de Nueva Democracia, Antonis Samaras, y el del PASOK, Evangelos Venizelos, no sacan los votos suficientes, tienen pocas opciones para sumar apoyo.

La Izquierda Democrática de Fotis Kouvelis, una escisión de la Coalición de Izquierda, es el más moderado de los cuatro aspirantes a quedar terceros. Si se niega a unirse a un Gobierno favorable al rescate, los dos grandes podrían tener que acudir a grupos aún más pequeños, como el que encabeza la ex ministra de Relaciones Exteriores y ex militante de Nueva Democracia Dora Bakoyanni.

"Los dos partidos principales deben ponerse serios. Es la peor campaña electoral que he visto. Ambos prometen cosas que deberían haber hecho como Gobierno de coalición. No son convincentes", aseguró Nikolakopoulos.

Esta opinión se repite en los bares y cafés de todo el país, en el que las medidas de austeridad y la ira contra los políticos por décadas de mala gestión y corrupción oscurecen la gran cuestión: si los griegos quieren quedarse o no en el bloque monetario común.

Para conmoción de los políticos, los griegos están incluso optando por grupos como el ultranacionalista Amanecer Dorado, que se espera que entre en el Parlamento por primera vez. Venizelos ha pedido a los votantes que no permitan que los "neonazis entren al Parlamento".

La mayoría de los griegos, que han salido a manifestarse de manera habitual en protestas que en ocasiones han acabado con violencia odian las duras medidas de austeridad exigidas por los prestamistas internacionales, pero según los sondeos, quieren quedarse en la zona euro.

"Nueva Democracia y PASOK deben convencer a los votantes de que, no importa lo enfadados que estén, no deben poner en peligro la pertenencia a la zona euro. Políticamente, sólo hay un escenario realista", dijo Costas Panagopoulos, de la encuestadora ALCO.

Un total de 32 partidos políticos participarán en los comicios, informó la Comisión Electoral Central y según las encuestas, unas 10 agrupaciones tienen posibilidades de superar el mínimo del 3% de los votos necesarios para tener representación parlamentaria.

Si se cumplen los sondeos y resulta un Parlamento muy fragmentado, se podrían repetir las elecciones.

La sombría economía helena

*Grecia, dos veces rescatada financieramente, está en su quinto año consecutivo de recesión y el PIB real ha declinado en más de 13% desde 2009.           

*George Provopoulos, del Banco Central, dijo que la economía se contraería otro 5% en 2012. El FMI prevé una contracción de 4.5% a 5%, dado el agudo ajuste fiscal y reformas al mercado laboral.        

*Provopoulos proyectó que la brecha de la cuenta corrientede Grecia, un indicador clave que refleja la erosionada competitividad económica, se reducirá a 7.5% del PIB en 2012 desde el 9.8% en 2011.      

*La deuda nacional se ha elevado a 350,000 millones de euros (464,000 millones de dólares) en 2011 desde 159,000 millones de euros (210, 000 millones de dólares) en 2002. 

*La tasa de desempleo entre jóvenes griegos (menores de 25 años) alcanzó en diciembre de 2011, el 50.4%.     

Con información de Notimex