Cataluña pide rescate a España
La región española de Cataluña, una de las más ricas del país, solicitó este martes un préstamo al Gobierno central para hacer frente a los vencimientos de deuda que afronta en lo que queda de año, en un nuevo ejemplo de la pésima situación económica y financiera que atraviesa España.
Cataluña pidió 5,023 millones de euros (6,300 millones de dólares) del llamado Fondo de Liquidez Autonómico, un fondo de rescate local creado por Madrid para ayudar a las 17 regiones españolas, que encaran graves problemas de líquidez por la crisis que sacude el país ibérico.
La región catalana, en el noreste de España, debe pagar 5,755 millones (7,245 millones de dólares) antes de final de año.
Además de Cataluña, las comunidades de Valencia y Murcia también se acogieron a esta fórmula, que permite acceder al dinero a cambio de más control del gasto, ajustes y equilibrio presupuestario.
Cataluña, una comunidad con un fuerte sentimiento nacionalista, es la región más endeudada de España. Su volumen de deuda supone casi el 30% de los 145,000 millones de euros (181,950 millones de dólares) que debían el conjunto de las 17 comunidades en el primer trimestre del 2012, según las últimas cifras del Banco de España.
El portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs, aseguró que no se aceptarán "condicionantes políticos" a cambio de la ayuda y que Cataluña sólo está pidiendo a España parte del dinero que los contribuyentes catalanes aportan con sus impuestos.
Una de las viejas reivindicaciones catalanas, que ya goza de un amplio autogobierno, es disponer de una Hacienda propia que le permita gestionar y recaudar sus propios impuestos independientemente del resto de España.
La petición de asistencia financiera de Cataluña, que se venía rumoreando desde hace meses, se produjo en una buena jornada para España en los mercados.
El Tesoro vendió casi 4,000 millones de euros (5,010 millones de dólares) en subastas de deuda a corto plazo, en las cuales los inversionistas aceptaron pagar tasas de interés mucho más bajas, en un reflejo de un alivio en la preocupación de que el país necesitará un intervención total de su economía.
España colocó 1,670 millones de euros (2,095 millones de dólares) en letras a tres meses con un promedio de interés del 0.95%, muy abajo del 2.43% de la última subasta de ese tipo, el 24 de julio.
Además, vendió 1,930 millones de euros (2,420 millones de dólares) en letras de seis meses con el 2,03% con respecto al 3,69% de la anterior subasta.
La demanda fue muy fuerte para ambas subastas.
La tasa de interés de España descendió recientemente con la esperanza de que el Banco Central Europeo intervendrá en los mercados a fin de moderarlos, ayudando a España a evitar recurrir a un préstamo de rescate soberano.
La subasta del martes se produjo antes de las conversaciones entre el presidente del gobierno español Mariano Rajoy el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy.
