Un diputado se desnuda en el debate

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En el debate de la reforma energética en la Cámara de Diputados no solo hubo discusión sobre el tema energético. Un diputado que se desnudó en la tribuna, una diputada que terminó en el hospital, ataques verbales de los grupos contrarios, la clausura del Salón de Plenos y hasta legisladores que se disfrazaron para poder entrar a San Lázaro, marcaron la sesión en la que se aprobó en fast track la entrada de capital privado al sector de la energía.

Se desnudó en la tribuna

Pasaban de las 03:00 de la madrugada y transcurría la discusión en lo particular, cuando el diputado del PRD Antonio García Conejo, medio hermano de Silvano Aureoles Conejo -coordinador de la bancada perredista- subió a la tribuna improvisada en el salón acondicionado como sede alterna para presentar una reserva a un artículo transitorio de la reforma.

"¿Qué se han creído ustedes, diputadas y diputados de Acción Nacional y del PRI, para venir aquí a desobedecer el mandato que se les confirió? Eso se llama traición a la Patria", dijo el legislador.

"Así como han despojado a la Nación con privatizar Teléfonos de México, así están despojando a la Nación...", decía el legislador, cuando sorpresivamente comenzó a quitarse la ropa en la tribuna.

"No me avergüenza, porque es lo que están haciendo. Quitaron y privatizaron Teléfonos de México y ¿dónde está el beneficio? También Ferrocarriles de México", decía, y se iba quitando los zapatos, la camisa, el pantalón, con el sonido de fondo de los chiflidos que le hacían burla.

"Sí, solamente me queda esto, de esto no me van a poder despojar, no lo van a lograr", afirmó una vez que quedó solamente con su trusa puesta, ante las carcajadas de los diputados y diputadas priistas que ocupaban las primeras filas del improvisado salón de sesiones.

"No me da pena, ustedes también tienen cuerpo. Es lo que están haciendo, sí, es una miseria, lo puedes llamar como quieras. ¡Eres un cobarde, eres un cobarde porque no toleras lo que estoy diciendo!", retaba desde la tribuna a quienes le gritaban que escondiera sus "miserias" de la vista pública.

No fue el único momento en que los perredistas fueron protagonistas de la sesión.

La mandó al hospital

Karen Quiroga, diputada perredista, tuvo un altercado con la diputada priista Landy Berzunza, quien increpó a sus opositores en repetidas ocasiones mientras los legisladores de izquierda votaban.

Uno de ellos comenzó cuando Karen Quiroga intentaba acercarse a la zona donde se presentaban las reservas y Landy Berzunza trató de impedírselo.

Comenzaron entonces los empujones y arañazos entre ambas pero Quiroga lastimó a Berzunza en el ojo izquierdo, provocándole una herida al interior del ojo.

De inmediato, Berzunza fue llevada al servicio médico de la Cámara Baja, donde le colocaron un parche y más tarde fue trasladada a un hospital privado para completar su atención, según dijeron diputados del PRI.

Minutos después, Quiroga hizo uso de la tribuna y, desde ahí, ofreció una disculpa a Berzunza.

"Quiero iniciar pidiendo, más bien ofreciendo una disculpa, primeramente a la diputada Landy Berzunza, quien en esta sesión y en estos últimos acontecimientos tan álgidos en sesión, en donde lo que ha prevalecido no ha sido el diálogo, sino han sido los empujones, los golpes, los manotazos, las pérdidas del paso", dijo Quiroga en tribuna, a punto del llanto.

Fue el coordinador de los diputados del PRI, Manlio Fabio Beltrones, quien reprochó el ataque a su compañera de bancada y le exigió a Quiroga que utilizara más la cabeza.

"Confío en que lo que le sucedió a la diputada no sea de mayor gravedad. Aceptamos sus disculpas y sobre todo le recomendamos que en el futuro use más las ideas que las manos", reprochó Beltrones.

Después de hablar en tribuna, Karen Quiroga estuvo llorando en el salón de plenos alterno y fue la diputada perredista Malú Micher quien trataba de consolarla.

Diputados priistas afirmaron que es probable que Landy Berzunza presente cargos judiciales contra Quiroga por el delito de lesiones.

Les regaló huevos para "defender a México"

Los ataques verbales entre los contrarios también fueron la constante durante toda la sesión.

La perredista Claudia Águila hizo uso de la tribuna para presentar una reserva y aprovechó para hacerle un regalo a los diputados que aprobaron la reforma.

"Quiero hacer un obsequio a los diputados del PRI, del PAN, del Panal (Nueva Alianza) y del Verde", dijo mientras sacaba una bolsa de huevos.

"No les van a alcanzar para defender al pueblo de México, pero aquí les dejo unos pocos para que se los repartan", afirmó Águila, quien dejó la bolsa con huevos en la mesa donde despachaba Ricardo Anaya y otros miembros de la mesa directiva.

El panista Ricardo Anaya, de inmediato tomó la bolsa y la bajó, poniéndola a un lado de su asiento, ante las risas de los diputados de izquierda que se encontraban en el salón de plenos improvisado.

Tomamos a la "Viva México"

En una acción sorpresiva, que ni siquiera el coordinador de la bancada perredista se esperaba, diputados del PRD, PT y Movimiento Ciudadano decidieron cerrar los accesos al Salón de Plenos de San Lázaro con la intención de no permitir el debate de la reforma energética.

Alrededor de 60 legisladores comenzaron a poner curules y cadenas en las puertas de entrada al Salón de Plenos y, con la advertencia de que nadie podría entrar o salir, algunos diputados del PRI que se encontraban al interior se retiraron a toda prisa del recinto.

Según diputados del PRD, la toma del Salón de Sesiones se planeó desde hace varios días por el ala de legisladores cercanos a Andrés Manuel López Obrador. En la mañana del miércoles, cuando era inminente la discusión de la reforma energética, se comunicaron por chat para ejecutar su plan.

"Pues es que era así, a la ¡Viva México!, así nos comunicamos y nos vinimos para acá, para agarrarlos desprevenidos", dijo el perredista Ángel Cedillo.

Mientras eso ocurría se encontraba reunida la Junta de Coordinación Política donde, supuestamente, ya se planeaba enviar la minuta de la reforma energética a comisiones, para su estudio.

Manlio Fabio Beltrones, coordinador de los diputados priistas dijo que, luego de lo ocurrido, se tomó la determinación de que se dispensaran todos los trámites y se discutiera directo en el Pleno.

"Un grupo de diputadas y diputados de distintos partidos políticos se han arrogado y secuestrado lo que ha todos nos pertenece, que es el recinto legislativo. Prácticas como ésas son las que nos tienen aquí. Decisiones arbitrarias, como ésas, violentas y que han lastimado a diputadas y a diputados son las que nos tienen aquí", acusó Beltrones.

Mientras se discutía la reforma energética en un auditorio habilitado como salón alterno, en el Salón de Plenos los diputados de izquierda realizaban posicionamientos desde la tribuna y los transmitían por internet para difundir su postura respecto al tema.

Disfrazados en San Lázaro

El cerco de seguridad alrededor del Palacio Legislativo de San Lázaro dificultó el ingreso no solo del personal que labora en el recinto, sino de los propios legisladores.

Algunos tuvieron que mentir y disfrazarse para poder accesar.

Homero Niño de Rivera, diputado del PAN, subió a su cuenta de Twitter una fotografía donde se le ve portando un uniforme de la policía.

"La entrada a San Lázaro fue vergonzosa. Aquí preparando el operativo para que algunos diputados pudiéramos acceder".

"Y aquí su servidor disfrazado de policía para poder entrar a mi trabajo. Increíble!", escribió en la red social.

Otro que tuvo que mentir sobre su identidad fue Ernesto Núñez, diputado por el PVEM, quien tuvo que decirle a los manifestantes que era un médico de la Cámara de Diputados para que lo dejaran entrar.

"Les tuve que decir que era médico de la Cámara y venía a trabajar, me puse ropa de civil y solo así pude entrar", dijo Núñez a ADNPolítico.com.

Otros diputados tuvieron que entrar por los accesos del metro ante la dificultad para llegar en sus autos.