Gasolinas, un respiro para la recaudación de Hacienda
En medio de una caída acelerada de los precios del petróleo, el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a la gasolina y al diesel representa un amortiguador para las arcas del país.
Desde inicios de 2016, el impuesto a los combustibles automotrices es fijo y así dejó de estar referenciado al desempeño y costos de Petróleos Mexicanos (Pemex) . Esto ayudará a Hacienda a mantener una entrada continua de ingresos por IEPS, en medio de la caída de los precios del petróleo que aún aporta 20% a los ingresos públicos del país.
“Sí es un amortiguador (el IEPS a combustibles) porque como antes se calculaba, la tasa variaba. Ahora su recaudación está en función de los litros vendidos de gasolina en el país”, dijo en entrevista el investigador del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), Fernando Ramones.
En este contexto, Hacienda estima recaudar 223,502 millones de pesos (mdp) por IEPS a gasolina y diesel para uso automotriz en 2016. Hasta noviembre de 2015 recaudó 196,106 mdp, según cifras de la dependencia.
El cambio creará un flujo estable de ingresos por IEPS, esto porque la implementación de una cuota fija aumenta la previsibilidad presupuestaria y pone un piso a los ingresos por este concepto, explicó Moody’s en un reporte.
Hasta noviembre, los ingresos petroleros del gobierno habían caído 36.7% anual a 724,054 mdp desde 1.113 billones de pesos del mismo lapso de 2014. El precio de la mezcla mexicana de petróleo ha caído 45% desde inicios del año pasado.
Desde el 1 de enero de 2016, la gasolina y el diesel operan en una banda de fluctuación con un precio máximo y uno mínimo que se determinan cada mes. El IEPS fijo es de 4.16 pesos para el litro de gasolina menor a 99 octanos; 3.52 pesos para la que tenga más o igual a 92 octanos; 4.58 para el diésel y 3.52 para los combustibles no fósiles.
Cuando los precios estén fuera de la banda, Hacienda puede intervenir para evitar fluctuaciones abruptas a través de un ajuste a la cuota del IEPS que corresponda. En el sistema anterior, el IEPS podía tomar la forma de un impuesto sobre el consumo o un crédito fiscal dependiendo de si el ajuste era negativo o positivo.
"Es muy interesante el cambio porque el impuesto que más incrementa (en términos de recaudación) en la Ley de Ingresos es el IEPS y más en el área de combustibles. Hizo una separación, antes el impuesto era en Magna, Premium y diesel ahora lo hizo en octanajes y hace que las compañías que vengan a invertir conozcan la cuota que tendrán", dijo a CNNExpansión el integrante de la Comisión Fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México, Manuel Baltazar.
El fiscalista agregó que este IEPS no resuelve la caída en los precios del petróleo, pero por lo menos Hacienda puede mantener cierta seguridad en esta recaudación. Adicionalmente, explicó que la fiscalización será una de las fuentes para que Hacienda vea más dinero, pues este año el SAT planea hacer 12,000 auditorías fiscales.
“Cuando los precios del petróleo aumentaban y resultaban en que el precio de referencia se ubicara por encima del precio máximo al público, el IEPS se volvía negativo. Bajo este escenario, el gobierno otorgaba a Pemex un crédito fiscal equivalente a diferencia de precios multiplicado por el número de litros de gasolina vendidos. Como resultado, los consumidores pagaban un precio menor al que hubiera prevalecido en un mercado liberalizado”, explica Moodys.
En un reporte reciente, Barclays indicó que un acuerdo entre la OPEP y Rusia para recortar la producción de petróleo con el fin de apuntalar los precios es muy poco probable, y las noticias que surgieron este jueves respecto a que el ministro de Energía ruso buscaría un acercamiento con el cártel petrolero fue solo un intento para brindar un sentimiento de confianza al mercado.
