Cuatro senadores han muerto de cáncer en menos de 4 años
El cáncer ha sido uno de los grandes enemigos del Senado en la presente legislatura, pues cuatro senadores han fallecido por el padecimiento, tres tan solo en el último año.
Mónica Arriola
Este 14 de marzo, la senadora Mónica Arriola Gordillo, integrante del partido Nueva Alianza, murió luego de luchar los últimos seis años contra la enfermedad.
Aunque aún no existe un reporte oficial sobre las causas de su muerte, desde 2008 le fue detectado cáncer de mama. Algunas versiones periodísticas indican que el cáncer llegó al cerebro. Senadora por Nueva Alianza, falleció a los 44 años en la Ciudad de México.
Braulio Fernández
Apenas un mes antes, el senador Braulio Manuel Fernández Aguirre murió bajo un tratamiento de cáncer. El legislador de 74 años, del Partido Revolucionario Institucional, recién regresó a México luego de recibir quimioterapia en Estados Unidos cuando su condición médica empeoró.
Murió en un hospital de la ciudad de Saltillo, Coahuila, estado por el cual fue electo en 2012.
Manuel Camacho
Dos veces aspirante a la presidencia de la República, así como regente capitalino, el senador Manuel Camacho Solís murió en junio de 2015 luego de un año de luchar contra el cáncer.
Desde junio del año anterior dejó sus funciones como senador para seguir un tratamiento. Aunque reapareció en enero de 2015 en la plenaria del Partido de la Revolución Democrática y finalmente falleció el año pasado.
Alonso Lujambio
Electo por el Partido Acción Nacional, el senador Alonso Lujambio falleció apenas dos meses después de ser electo para el cargo, en julio de 2012.
Durante meses estuvo bajo tratamiento por el cáncer de médula ósea que padecía. Se presentó en el Senado para la toma de protesta de los legisladores, el 30 de agosto de 2012. Sin embargo, falleció el 25 de septiembre de ese año.
Desde el 2000, otros tres senadores también fallecieron durante su encargo pero a consecuencia de infarto.
Alejandro Galván Garza, senador por Tamaulipas bajo las siglas de Acción Nacional, murió de un infarto cerebral en noviembre de 2006. Apenas en septiembre de ese año había asumido su escaño en la Cámara alta.
En junio de 2004, el senador Daniel López Nelio, del Partido de la Revolución Democrática, sufrió un infarto junio de 2004. Falleció a los 55 años.
En la legislatura que inició en 2000, la Cámara de Senadores también resintió la muerte de Rafael Cañedo Benítez, quien fue víctima de un infarto al miocardio en julio de 2001.
