La crisis sanitaria por COVID-19 provocó que la utilidad neta de HSBC en México tuviera un desplome de 99% en 2020, y espera que la mala racha continúe durante una parte del 2021.
El banco reportó que tuvo una utilidad de solo 64 millones de pesos (mdp), una cifra considerablemente menor a los 8,999 mdp que tuvo de utilidad en 2019.
"El brote de COVID-19 ha tenido, y sigue teniendo, un impacto material en las empresas de todo el mundo y en los entornos económicos en los que operan. El brote ha causado interrupciones a nuestros clientes, proveedores y personal", destacó el banco en su reporte trimestral.
HSBC destacó que existe el riesgo de que haya afectaciones en los resultados del 2021 dependiendo de los impactos de las nuevas oleadas por COVID-19, el suministro de vacunas y la confianza de la población por las mismas.
"Si el brote continúa causando interrupciones en la actividad económica, se espera que genere un aumento en las pérdidas crediticias esperadas, una reducción en nuestros ingresos debido a menores volúmenes de préstamos y transacciones y menores tasas de interés que impactarán negativamente en los ingresos netos por intereses", destacó el banco en su comunicado.
La cartera de crédito tuvo una caída del 10%, al sumar 348,800 mdp, mientras que el índice de morosidad de ubicó en 2.8%, un porcentaje superior al 2% reportado al cierre de 2019.
Pese a una caída en las utilidades, HSBC México reportó ingresos por comisiones de 7,776 mdp un incremento de 38 mdp respecto a 2019.
Sobre el programa de diferimiento de créditos que se otorgó en marzo pasado, el banco dijo que se dieron apoyos por 27,000 mdp, que representó el 10% de la cartera total. El 98% de los programas de apoyo ya vencieron y el 20% de la catrera de pymes muestran problemas para hacer los pagos.
Para las carteras de banca minorista, los programas de ayuda alcanzaron 22,000 mdp a junio y al cierre del 2020, el 64% ha reanudado el pago regular y el 36.0% muestra diferentes niveles de problemas para hacer los pagos.
