Plan de emergencia
Bajo este pensamiento de concentrar esfuerzos para hacerle frente a la crisis sanitaria y salir adelante, RedBox creó el Plan Fénix, una estrategia con el objetivo de darle claridad al cliente sobre cómo actuar en medio de la incertidumbre.
“Nadie sabía para donde moverse, así que decidimos decodificar algunos mensajes para ayudarles a tomar decisiones de innovación y, como era obvio, lograr reinventarse”, detalla el director general de la agencia.
El Plan Fénix, que fue resultado de un análisis hecho con economistas, calificadoras financieras, clientes y expertos en salud, se conforma de cuatro dimensiones:
1. Tensión. Este parte del plan se puso en marcha durante los primeros meses de la contingencia sanitaria. El objetivo era entender lo que significaba la pandemia para las empresas y generar estrategias para garantizar su continuidad. Nuevas formas de trabajo, ayudar a los colaboradores y a la sociedad fueron algunas de las acciones que se implementaron.
2. Descongelamiento. Una vez que las medidas de confinamiento se redujeron, la mayoría de las compañías pudieron reactivar sus actividades. Esto implicó transitar a un nuevo modelo de operación, con reglas sanitarias y con nuevas satisfacciones del cliente por cumplir. En esta etapa, la construcción fue clave.
3. Reactivación. Sin haber terminado la pandemia, pero ya con la oportunidad de continuar operando sin tantas restricciones, las firmas tienen que pensar en generar alianzas de negocios, en incluir nuevos mercados y hasta en experimentar con productos o servicios de un sector distinto al de origen. Los hábitos de consumo son completamente diferentes a los que existían antes de la pandemia, así que quedarse en el mismo lugar es un grave error.
4. Transformación. Aquí ya hay una claridad completa del panorama, ya se entiende que la pandemia es parte del día a día y que se tienen que aprender a hacer negocios con ella. Las empresas deben evolucionar y ser capaces de enfrentar nuevos rebotes. Para llegar a esta etapa es necesario innovar y reaccionar tan rápido como el mercado lo exige.
“Todavía es muy aventurado dar un pronóstico sobre si la inversión va a despegar después de la pandemia, ya que así como habrá algunas compañías que necesitan reinventarse para regresar al mercado, habrá otras que solo requieran mantener el orden que tienen hasta ahora. Pero, lo que sí es verdad es que la innovación será necesaria”, concluye Ramírez.