Los empresarios no obtuvieron este domingo el paquete de incentivos y concesiones fiscales que reiteradamente han solicitado al gobierno federal en las dos últimas semanas.
Las cúpulas empresariales esperaban que dentro del informe trimestral de actividades el presidente incluyera un paquete de medidas e incentivos que les permitiera mitigar el impacto económico que dejará la crisis sanitaria derivada de la explosión de casos de coronavirus Covid-19.
Pero del medio centenar de medidas propuestas por el CCE al gobierno federal, hasta ahora, solo han obtenido la confirmación de que en los próximos días tendrán la devolución del Impuesto sobre el Valor Agregado (IVA).
“Se cumplirá cabalmente el compromiso de devolver el IVA con prontitud a los contribuyentes, como me lo han solicitado los representantes del sector empresarial”, dijo AMLO en su mensaje.
Durante su informe trimestral, el presidente reiteró que los programas sociales, la inversión en los megaproyectos de infraestructura —como el aeropuerto de Santa Lucía Felipe Ángeles, la nueva refinería de Dos Bocas y la construcción del primer tramo del Tren Maya—, y la austeridad gubernamental permitirán recuperarse de la contracción del 4% en el PIB que Fitch Ratings proyecta para este año.
“El plan de recuperación económica que estamos aplicando no se ajusta al modelo neoliberal. Ya rompimos el molde que se usaba para aplicar las llamadas medidas contracíclicas que solo profundizaban más la desigualdad y propiciaban la corrupción en beneficio de unos cuantos”, dijo AMLO. “Se iniciará pronto la recuperación económica a partir de aumentar la inversión pública destinada a la creación de empleos y a otorgar créditos a pequeñas empresas familiares y a quienes se buscan la vida como pueden día con día”, añadió.
En las últimas dos semanas, la pandemia ha puesto un abrupto freno al consumo de decenas de productos y servicios alrededor del mundo: aerolíneas y hoteles están lidiando con cancelaciones de reservas; los fabricantes de autos han parado sus plantas ante la falta de componentes y de empleados; los cines y teatros lucen butacas vacías; mientras que los restaurantes tratan de sobrevivir surtiendo órdenes para llevar.
Entre los apoyos urgentes que los empresarios solicitaron al gobierno federal a fin de tener liquidez para enfrentar la crisis económica están la eliminación durante el 2020 de las declaraciones de pagos provisionales de ISR, la deducción del 100% de las erogaciones por sueldos y salarios para la pequeña y mediana industria, la devolución de IVA, la deducción inmediata de inversiones en capital de trabajo, y un crédito de 90 días en el pago de electricidad.
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Las propuestas enviadas a la oficina de la presidencia en las últimas dos semanas, también incluyen medidas que, a decir de los empresarios, deberían de ser implementadas en el mediano plazo a fin de reactivar el consumo, el empleo y la economía, una vez que se haya superado la crisis sanitaria.
Algunas de estas medidas encaminadas en este propósito son
El CCE, presidido por Carlos Salazar, ha dicho que tras la Semana Santa buscará un nuevo acercamiento con el presidente.
Ante el discurso de “austeridad y ahorro” que ha tomado el gobierno federal para afrontar la crisis económica que seguirá a la emergencia sanitaria, diversos organismos y cámaras empresariales lanzaron mensajes de descontento.
El gobierno federal nos está pidiendo hacer lo imposible: pagar el 100% de impuestos y contribuciones teniendo cero ingresos. Nadie está obligado a lo imposible, sin embargo, los afiliados vamos a hacer todo lo que esté en nuestras manos por mantener empleo.
A pesar de este sombrío escenario, el gobierno federal encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador se ha negado a escuchar, a realizar un ajuste razonable a su agenda política en función de las circunstancias, y a modificar su discurso de polarización por uno de unidad.
Lamentablemente el mensaje del presidente. Reafirma su convicción de no reconocer la gravedad de la crisis que enfrentamos: la peor de nuestra generación y la más profunda de los últimos 100 años.
