Los éxitos en taquilla son también aclamados por la crítica esta temporada
Cada año por estas fechas, los cines comienzan a llenarse con “serias”, candidatas al Oscar, ganadores de festivales, las favoritas de los fanáticos independientes.
Pero en los últimos años, esas películas han tenido un problema: no han atraído tanta audiencia en la taquilla.
Por supuesto, han atraído una audiencia. La película muda El artista , la ganadora del año pasado a mejor película ganó 44 millones de dólares localmente. Sin lugar para los débiles de los hermanos Coen, que ganó el gran trofeo en 2008, permanece como el segundo filme más taquillero, después de Temple de acero de 2010.
Hay una división creciente entre los que quieren complacer a las multitudes y la serie de películas de la temporada de premios, señala Clayton Davis, editor de AwardsCircuit.com.
“A todos mis amigos que no les gustan las películas siempre se quejan (diciendo) ‘los Premios Oscar siempre son todas estas películas de las que nunca he escuchado’. No generan mucho dinero, pero son de buena calidad”, dice.
Sin embargo, este año, espera que sus amigos presten atención.
“Esta es la competencia por el Oscar más competitiva que he cubierto en mis 10 años de cubrir los Premios Oscar”, dice. “Son películas (a las) que les irá bien en los Premios Oscar, pero las personas podrán nombrarlas”.
Si ese es el caso, será un alivio para los que tienen el poder en Hollywood.
“Todo el mundo se reduce a no sólo ‘películas que valen un Oscar’ sino en dramas, punto”, dijo el productor Dan Jinks de Belleza Americana a GQ en febrero de 2011. “La precaución los ha hecho retirarse”.
Por supuesto, aún es un mundo de cómics y secuelas: Los vengadores, la película más taquillera del año, da fe de ello. Pero varios dramas críticamente aclamados también se han colado en el círculo de ganadores de la taquilla semanal, incluyendo End of Watch y Argo. Magic Mike, una comedia y drama del impredecible director Steven Soderbergh, alcanzó los 100 millones de dólares.
Y algunas películas como Lincoln, Life of Pi y Flight han tenido mejores lanzamientos de lo esperado, y lo que es más importante, han dado mucho de qué hablar entre los adultos, que tradicionalmente no claman por ver películas en los fines de semana de estreno como los adolescentes.
Un momento crucial para esta tendencia vino como resultado de El discurso del rey, la ganadora a mejor película que se construyó lentamente en 2010 y que generó 136 millones de dólares localmente y otros 275 millones de dólares en el extranjero, aseguró Anne Thompson, la exeditora de Variety.com que ahora bloguea en Thompson on Hollywood de Indiewire.com.
A los estudios generalmente les gusta apostar por películas de acción (que requieren poca traducción) para ganancias internacionales, pero El discurso del rey que tenía mucho diálogo se las arregló para cambiar esa creencia completamente.
“Los estudios habían terminado con los dramas”, dice Thompson. “ El discurso del rey llegó, generó una gran cantidad de dinero, ganó y mostró que había una audiencia real para algo como esto”.
La tormenta perfecta
“La taquilla está en ascenso ahora, y creo que es debido a esa plataforma fuerte”, dice el analista de taquilla en Hollywood.com, Paul Dergarabedian, al explicar la frase “algo para todos” en el cine.
Dergarabedian puede enumerar lanzamientos próximos o recientes que apuntan a coincidir en una temporada exitosa. “Cuando le hablas a las personas sobre Silver Linings, Hitchcock, Life of Pi, Skyfall generando todo ese ruido; tener a personas realmente emocionadas por Les Miserables, Django Unchained y Zero Dark Thirty, películas que la gente aún no ve, es como la tormenta perfecta en estos momentos”.
No fue hace mucho tiempo cuando los dramas dominaban la taquilla al igual que complacían a los críticos. El Padrino, regularmente clasificada como uno de los mejores filmes de todos los tiempos, fue el rey de la taquilla desde su lanzamiento en 1972 hasta que Tiburón salió tres años después.
Atrapado sin salida fue un éxito enorme en 1975. El drama tranquilo Kramer vs. Kramer, la ganadora a mejor película de 1979, también fue la que mas recaudó en la taquilla ese año.
Incluso cuando la era dorada de la década de 1970 le abrió el camino a la década de 1980, aún había espacio para la variedad: E.T. y John Hughes, Carros de fuego y Academia de Policías, películas slasher y éxitos en lengua extranjera. Pero a medida que los cinéfilos de la posguerra crecieron y las tendencias de la cultura pop avanzaron, también las películas, aunque no siempre hacia lo mejor.
En el artículo de GQ, titulado The Day the Movies Died (El día en que murieron las películas), el autor Mark Harris culpa a películas como Top Gun por el descenso a la impecabilidad de películas que son para las masas. La película de 1986 era una emulación de MTV que caracteriza como “producto puro”, “amalgamas cosidas de ritmos de acción con anfetaminas, un elenco de estrellas, videos musicales, y un laminado de diamantes de adrenalina tecnológica diseñados para distraerte de su falta de coherencia interna, credibilidad narrativa, o calidades humanas reconocibles”.
“Si las películas ahora fueran vistas como paquetes, entonces los nuevos reyes del negocio serían comercializadores, que podrían hacer que la envoltura de ese paquete se viera espectacular incluso si el contenido fuera deficiente”, escribe Harris.
Más espacio para la creatividad
En el cuarto de siglo transcurrido desde ese entonces, los estudios han invertido más en espera de ingresos mayores. Y debido a que lo familiar es el concepto más fácil de vender, los presupuestos generalmente son asignados a secuelas, relanzamientos, adaptaciones de programas de televisión y cómics. Con notables excepciones, El silencio de los inocentes, el salto del género de Quentin Tarantino, la ocasional sorpresa de Clint Eastwood, son los éxitos de taquilla los que terminan abrumando las listas de las taquillas de finales de año.
Por supuesto, la lista de este año también presenta éxitos de taquilla. Pero con Magic Mike, Lincoln, Argo y Flight encabezando o acercándose a esa medida clave de los 100 millones de dólares, hay señales de que los dramas populares de estudios importantes harán un regreso.
Si una película de un estudio importante gana a mejor película, será la primera en hacerlo desde Los infiltrados de 2006.
Como Steven Johnson lo señaló en su libro de 2005 Everything Bad is Good for You (Todo lo malo es bueno para ti), vivimos en una época en la que la cultura pop se ha vuelto más rica y más compleja, mejor expresada por la historia detallada en series de televisión como Los Soprano y Lost, que han atraído a grandes audiencias y elogios de la crítica.
Estos productos tienen más oportunidades de espacios, ya sea en televisión, películas independientes, documentales, internet o películas grandes de estudio, dice Michelle Satter, directora fundadora del Programa de Películas del Instituto Sundance, un terreno de entrenamiento líder para la industria del entretenimiento.
“Hay un aspecto borroso en las líneas (entre los medios) donde los cineastas pueden contar sus historias”, dice. “Esos medios de producción están fácilmente disponibles”.
El festival de cine de Sundance ha proporcionado apoyo a varios cineastas que actualmente crean movimientos, incluyendo el director de El caballero de la noche asciende, Christopher Nolan, el Maestro Paul Thomas Anderson , y Tarantino. Son el tipo de directores que conocen sus oficios y la historia de sus filmes.
Otro lugar brillante en el cine popular es la destreza que los directores, escritores y actores han traído al entretenimiento escapista de gran presupuesto. La trilogía de El caballero de la noche de Nolan fue ampliamente exitosa en muchos niveles. A Los vengadores ya les iba a ir bien, pero gracias a algunos toques inteligentes del escritor-director Joss Whedon (quien coescribió Toy Story y creó Buffy la cazavampiros) la película ganó una clasificación brillante del 92% de parte de los críticos en el agregador de reseñas Rottentomatoes.com.
La nueva película de James Bond, Skyfall, tiene las usuales secuencias increíbles de acción, pero algo de firmeza genuina, por lo que ha sido clasificada con altas notas por parte de quienes hacen las reseñas y podría convertirse en la película Bond más exitosa de la taquilla .
Redes sociales, la otra crítica
Eso destaca el papel del crítico fundamental en el cine, la audicencia, asegura Thompson de Thompson on Hollywood.
“Con las redes sociales, no solo puedes asumir que una película puede ser estúpida y mala y solo salirte”, dice. “(Los estudios) tienen que hacerlas mejor; no tienen opción. Antes podían salirse con la suya; ya no”. Si una película quiere tener una circulación de larga duración, tiene que ser exitosa más allá del primer fin de semana, y eso significa tener a la audiencia de tu lado para que los espectadores no publiquen resultados en Twitter y Facebook después de la noche de estreno del viernes.
Algunas películas han sido las víctimas de las primeras críticas. Los estudios ya han reprogramado películas de gran presupuesto como World War Z y la secuela de G.I. Joe, con la esperanza de que al hacerlo se vuelvan más apetecibles, dice Thompson.
Ahora, junto con “nadie sabe nada”, la otra verdad de Hollywood es la del Eclesiastés: no hay nada nuevo bajo el sol. (O, como el fundador de Warner Bros., Jack Warner, dijo, según reportes, “no se hacen películas grandiosas. Se rehacen”).
Las películas de esta temporada tienen sus raíces en un musical de mucho tiempo basado en una novela clásica ( Les Miserables ), en un libro best-seller (Life of Pi), en la actualidad sacada de los titulares (Zero Dark Thirty), y en historias sobre uno de los líderes más reconocidos en la historia de Estados Unidos (Lincoln). Les Miserables también tiene la fuerza de taquilla de grandes estrellas con Russel Crowe, Hugh Jackman y Anne Hathaway.
En otras palabras, uno puede afirmar que estas películas son vendidas previamente como cualquier película de cómics.
Pero de nuevo, las estrellas no estrenan películas en la forma en la que solían hacerlo, e incluso las películas más comercializadas y notablemente anticipadas pueden fracasar. ¿Recuerdas John Carter?
Así que mientras se descifra si la mezcla de éxito popular y elogio crítico es algo pasajero o una tendencia en ascenso, es algo que debe ser celebrado por los cinéfilos. Las películas, para bien o mal, permanecen a la cabeza de la cadena alimentaria de la cultura pop. Son costosas y a menudo desechables, así que cuando están bien ejecutadas, cuando en realidad tienen éxito al conmovernos, los fanáticos deberían esperar que haya espacio para más.
“Es un momento grandioso y emocionante para el cine y la creatividad”, dice Satter de Sundance. “Y la audiencia quiere ser parte de ella”.