Adams pega su chicle con 50 mdd
“Tenemos confianza en México”, afirma Erik Seiersen, director general de Cadbury Adams para México, Caribe y Centroamérica. Y cómo no la va a tener, si en el último año la empresa aumentó su participación de mercado a 80%.
Los productos sin azúcar, con rellenos y blanqueadores dentales, así como agresivas campañas publicitarias empujaron las ventas 12%.
Estos indicadores fueron decisivos para reforzar su posición en México a través de 50 millones de dólares que desembolsarán en lo que resta de 2009. La inversión será para apuntalar su estrategia y mantener a México como el segundo país que más consume chicles después de Estados Unidos. El mexicano consume 1.2 kilogramos de gomas de mascar contra 2.4 kilogramos per cápita en EU.
Cadbury Adams, de origen británico, tiene sólo una planta de producción en el país, ubicada en el estado de Puebla, donde se elaboran 100,000 toneladas de goma de mascar y mentas. De esta cantidad, 62,500 toneladas son chicles.
“En nuestra planta se renovará la flotilla de distribución, innovaremos en tecnología, nuevos sabores y marcas”, explica Seiersen. Analistas resaltan que el dinamismo de la empresa se debe, en parte, a la innovación en marcas como Trident que hoy es la estrella del mercado con 41%. Otras marcas exitosas son Clorets, Max Air y las tradicionales Motitas, Dentyne y Bubbaloo.
En tiempos de crisis, las compañías aplican tijera a los presupuestos de mercadotecnia y publicidad. El directivo menciona que sería un error disminuir el presupuesto en Cadbury.
No da detalles, pero dice que en los siguientes meses emprenderán “una estrategia agresiva de mercadotecnia. Del presupuesto de esta área el 30% es para publicidad”, comenta Seiersen. La mayor productora de dulces y golosinas en el mundo prevé que la planta de Puebla exporte este año 20% de su producción a EU, Europa y América Latina.
Aunque datos recientes del INEGI revelan una baja en el volumen de ventas de chicles confitados y sin confitar, Cadbury Adams señala que no hay cambios de planes, incluso, el directivo confirma que la plantilla laboral de 3,700 personas se mantendrá intacta. “No habrá recortes”, dice. La presencia en México responde a “una decisión de confianza”, agrega.