Cuando ser bueno es negocio

Por segundo año consecutivo México será sede a fines de este mes de “Del -Dicho al Hecho”, la conferencia sobre Responsabilidad Social de la Empresa -(RSE).

- “La razón de organizar el evento aquí es precisamente porque tiene un -sector privado pujante, con algunas empresas que son líderes en América Latina -en RSE y modelos para el mundo” afirma Antonio Vives, del Banco Interamericano -de Desarrollo (BID) y uno de los promotores.

- En México y Latinoamérica no existe aún una conciencia generalizada de lo -que implica la RSE, “ni siquiera en las grandes empresas”, explica Vives. La -responsabilidad social suele confundirse muchas veces con filantropía, aunque -en realidad no tiene nada que ver una cosa con la otra.

- ¿Cómo identifica a cada una?: “Filantropía es la donación voluntaria de -algo con la responsabilidad que es asunción de deuda, mientras que la RSE -implica estructurar e institucionalizar un programa que engloba a los empleados, -clientes, sociedad en general y medio ambiente.”

- Bajo esta matriz, Alfredo Harp Helú es claramente un filántropo. Harp -destina recursos a través de su fundación para promover la educación y -preservar las artes. Como empresas algo similar hace Microsoft, que se dedica a -la promoción de la tecnología en sectores pobres de la sociedad alrededor del -mundo.

- La RSE es una mera estrategia de supervivencia para la empresa. Se trata del -cumplimiento de la función económica, social y ambiental que tiene una firma, -pero más allá de las expectativas que dicta la ley y que tiene la comunidad -respecto a la compañía.

- Ante los retos contemporáneos, la sociedad de manera creciente reconoce y -también exige un rol de la empresa como generadora de soluciones creativas para -el desarrollo sostenible. El sector privado es un proveedor clave para ofrecer -oportunidades económicas, capacitación y formación y hasta educación.

- Si el empresariado no actúa donde los gobiernos no han podido solucionar -problemas, se queda sin consumidores. “En algunas empresas líderes el -concepto está arraigado con conciencia de que la responsabilidad es ineludible”, -aclara Vives, también autor y editor de artículos y libros sobre el tema.

- Para siempre
-Hay algo muy claro en lo que a responsabilidad social se refiere: no se vale -dar algún donativo para que, ante alguna dificultad económica, se retire la -ayuda y se recurra a los despidos. La RSE es de por vida.

- “Para la mayoría de las pequeñas y medianas empresas, el concepto no pasa -de lo que sería más bien ciudadanía corporativa, que es la respuesta a las -demandas de la comunidad allegada, ya sean los clientes, trabajadores o el -público en general, para contribuir al desarrollo comunitario”, dice Vives.

- El funcionario del BID define la RSE como una responsabilidad de actuación -ante la sociedad global. La ciudadanía corporativa, por otra parte, solamente -se enfoca en los actores involucrados con su empresa. Esto implica vender -productos que cumplen lo que prometen, de calidad, a precios justos, producidos -con mano de obra que trabaja en condiciones dignas, usando recursos -responsablemente, sin dañar el medio ambiente, “si es posible mejorándolo, -contribuyendo al desarrollo de la comunidad en que opera”.

- Para muchos, la RSE se convirtió en una herramienta de mercadotecnia de -moda. Esta visión es miope, por calificarla de una manera benigna. “Habrá -quien actúa de manera irresponsable por ignorancia, pero hay quien carece de un -programa de RSE porque lo considera un costo, más que una inversión con -beneficios tangibles”, agrega Vives.

- “¿Qué sería de una empresa sin clientes… que no pudieran acceder a los -recursos naturales? La compañía debe ser responsable, en su diferente y justa -medida, ante todos aquellos que permiten su existencia” agrega.

- Un ejemplo de ello es el caso de algunos países desarrollados (especialmente -los europeos) donde los candidatos a un puesto de trabajo ya empiezan a -preguntar sobre el programa de RSE, porque es un factor que influye en su -decisión de tomar o no el puesto.

- Respuestas globales
-En Holanda, por ejemplo, no es suficiente con que un empresa entregue -resultados financieros, es menester en otorgar auditorías de impacto ambiental. -Muchos consumidores en la región dejan de comprar ciertos productos si su -creador ha actuado irresponsablemente en algún momento.

- Vives aclara que ello no quiere decir que se replique en Latinoamérica lo -que ocurre en los países más desarrollados, ya que cada nación tiene sus -peculiaridades. “La forma y profundidad de la adopción depende, en gran -medida, de la presión del medio.” Si bien la RSE está en pañales en la -región latinoamericana, el potencial para su instrumentación y desarrollo es -enorme. Ya existen esfuerzos aislados por parte de diversos actores -empresariales, pero falta institucionalizar la práctica.

- Varias organizaciones como Únete, enfocada a la educación; Aliarse; -Fundación Coca Cola; y Bancos de Alimentos, por mencionar algunas, incrementan -sus actividades en diversos sectores. Sin embargo, no existen mecanismos de -vigilancia independientes que califiquen si los esfuerzos se están enfocando -adecuadamente.

- “Si bien es cierto que hay muchísimas empresas que no tienen prácticas -responsables, poco a poco serán menos. La educación de los consumidores, el -dinamismo de la sociedad civil, la influencia de los medios de comunicación, -las regulaciones de los gobiernos, los requerimientos de los proveedores de -fondos, la presión de grandes compradores, entre otras fuerzas, harán -insostenibles las prácticas irresponsables”, anticipa el directivo del BID.

- Responsabilizarse por el bienestar propio y de los demás, implica mucho más -que hacer programitas que no solucionan de raíz los problemas. No sólo se -trata de dar dinero o especie, sino de dedicar tiempo, comprometerse con la -convicción de que el futuro está en manos de todos.

- Construir las variables necesarias para que la sociedad tenga mejoras -educativas, económicas y culturales podría provocar a mediano plazo un -círculo virtuoso que mejoraría la calidad de vida y repercutiría -positivamente en las empresas.

- La razón es bastante sencilla: como ha dicho Carlos Slim, “los pobres no -son negocio”.