por Antonio Alatorre. México, Fondo de Cultura Económica,1996. 80 páginas.
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Una idea que hizo regresar a muchos aficionados de telenovelas a leer libros nuevamente fue, hace dos años, la colección de libros encogidos (muy chiquitos) de Alianza Editorial, que eran cucharaditas de literatura, filosofía, ciencia, arte. Textos muy bien escogidos. El Fondo de Cultura Económica, que cuenta asimismo con miles de títulos en su acervo, quiso repetir la hazaña. A fines de 1996 lanzó “Fondo 2000”, una colección que no nada más rescata textos de autores mexicanos, su especialidad, sino que difunde pedazos de obras universales ahora difíciles de conseguir. Por supuesto, a los editores de esta serie no les costó elegir los autores y los temas que conformarían las primeras docenas de libros de esta colección tamaño miñón que casi salen regalados ($10 pesos). Alfonso Reyes: México en una nuez y otras nueces, Selma Laguerlöf: Algunas Leyendas de Cristo, James George Frazer: Objetos y palabras tabú... y hay obras de Octavio Paz, Rubén Darío, Homero, Alí Chumacero y de tantos otros. El apogeo del castellano, en este ejemplo, es una selección tomada del libro Los 1,001 años de la lengua española, del propio Antonio Alatorre. Aquí el idioma castellano mismo es el héroe de mil y una hazañas.