Para los sobrevivientes de la crisis desatada en diciembre de 1994, el sistema de franquicias es una de las mejores opciones para mantener o relanzar su negocio. Y si no, considérese que durante 1995 las empresas que operaron bajo este formato crecieron 15%, no obstante haber reducido dramáticamente su tasa de expansión del año anterior, que fue de 70%.
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No es de extrañar que incluso este tipo de negocios redujera su expectativa de crecimiento, ya que en 1995 la economía mexicana registró la recesión económica más profunda desde 1932. Como nunca antes, la contracción en 6.9% del Producto Interno Bruto (PIB) y los más de 2.2 millones de desempleados —cerca de 6% de la Población Económicamente Activa (PEA)— crearon un panorama de desastre para muchos negocios. Por supuesto, las franquicias también sufrieron en carne propia los estragos, pero en menor grado.
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Cierre de establecimientos, cancelación de proyectos, dificultades financieras, conflictos entre franquiciantes y franquiciatarios, caída de las ventas, abandono del sistema de franquicias, incremento en el precio de los insumos y renta de inmuebles fueron los problemas más importantes que padecieron las empresas que operan bajo este formato y que pusieron a prueba su manera de hacer negocios. Con todo, 1995 confirmó lo que se ha repetido hasta el cansancio: las franquicias son vulnerables a la crisis, pero en una proporción mucho menor a la de aquellos negocios que operan fuera de este formato. Si la presente crisis ha sido una de las más severas en más de 60 años, el sistema de franquicias ha pasado la prueba decorosamente.
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Por ejemplo, según la Asociación Nacional de Comida Rápida (Ancor) en 1995 cerraron alrededor de 100 establecimientos de comida rápida. Y no fue para menos, ya que el PIB del sector comercio disminuyó en 14.4%. No obstante, otros 200 puntos de venta abrieron sus puertas, con lo que el saldo final para este sector fue positivo. Paralelamente, franquicias como McDonald’s, Kentucky Fried Chicken y Pizza Hut, cambiaron de estrategia para enfrentar la caída de las ventas y el aumento de sus costos de operación mediante la sustitución de insumos extranjeros así como el ofrecimiento de nuevos servicios y la fusión de operaciones.
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Por otra parte, la Asociación Mexicana de Franquicias (AMF) informa que en 1995 se redujo en 15% la apertura de negocios. A decir de los franquiciantes, el aumento del costo del dinero debido al alza notable de las tasas de interés, hizo que muchos proyectos se propusieron para mejores momentos. Aún así, el número de puntos de venta al iniciar 1996 fue 13% mayor al del año anterior, representando poco más de 20% del empleo total en los establecimientos comerciales medianos. Además, su actividad significó una aportación de 6% al PIB de este sector y de 1% al PIB nacional. Según la fuente, 47.3% de las franquicias son importadas y 52.7% de origen nacional.
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El sistema de franquicias ha mostrado más cualidades que defectos para enfrentar con éxito la caída generalizada del consumo y la contracción del crédito. Cifras de la AMF, a marzo de este año, indican que el número franquicias afiliadas operando en el país suma ya 180, con 14,500 puntos de venta, una facturación de $3,000 millones de dólares y 135,000 empleos. Así las cosas, este sector de los negocios no sólo soportó la crisis razonablemente bien, sino que espera crecer este año de manera significativa. Tan es así, que la AMF estima que los establecimientos bajo este formato de negocio podrían crecer 25% durante 1996 y generar 20,000 empleos más. En esta perspectiva, la AMF espera se realicen inversiones por $150 millones de dólares.
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La sustancial erosión del mercado interno ha hecho volver la mirada de los franquiciantes hacia el exterior. Aunque no se dispone de cifras precisas de las franquicias mexicanas que operan fuera del país, en el listado que se presenta en esta edición se observan algunos casos interesantes, como Helados Santa Clara, con 53 franquicias en el exterior; Ultravisión, con seis; Compueducación, Parranda Sport y Reparto Directo, cada una con tres, e Interceramic y Furor, cada una con dos. Por otra parte, 10 franquicias esperan generar divisas por $10 millones de dólares durante 1996 exportando su concepto de negocio: Julio, Diversiones Moy, Vips, Helados Holanda, Ópticas Devlyn, La Baguette, Freedom, Dormimundo y Taco Inn.
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En el listado Franquicias en México el lector encontrará opciones entre 27 giros diferentes de negocios, que requieren de una inversión inicial que va de $10,000 a $7’500,000 dólares. Algunas de ellas no demandan el pago de -franchise fee. De las 157 franquicias que aparecen en el listado, 52.2% son de origen nacional y 5.7% ya tienen operaciones fuera de México.
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El informe Franquicias en México es elaborado anualmente por el Departamento de Investigación y Desarrollo del Grupo Editorial Expansión. Su coordinación está a cargo de Gerardo Mendiola. Se prohibe la reproducción total o parcial sin la autorización de los editores. Cualquier mención del contenido es permitida siempre y cuando se cite la fuente. El directorio -Franquicias en México1996 está disponible para su venta en el 207-20-66.