El tiempo es oro, pero hay minutos más caros que otros. Y de eso se trata el trabajo de María Garaña: administrar el tiempo que vende TV Azteca. Desde que llegó Garaña a la empresa –hace cuatro meses– se identifica con más precisión el valor de cada minuto (según el rating ), se premia con rebajas a los clientes que apartan sus espacios con anticipación, se castiga a los que cancelen a última hora… todo esto ha implicado cambios en TV Azteca, porque el departamento de ventas se tiene que someter a los inventarios que ella define, y en la relación con los clientes, que ahora tienen más información sobre lo que compran. Lo que sigue: echar a andar un sistema de ventas de tiempo en línea, que ahorrará esfuerzo a la empresa y los anunciantes.
- Garaña ha trabajado desde los 23 años en empresas como Merrill Lynch, Citibank, Andersen Consulting y Bain & Company, en empleos que la han llevado desde su natal España a Inglaterra, Turquía y Centroamérica. “Tengo una espinita que me quiero sacar: el no ser dueña de mi propia empresa”, dice. Aficiones: leer historia de España —“me gustan aquellos personajes que no pasan desapercibidos”—, el cine, al que va dos veces a la semana con su esposo, y correr una hora diaria (“es mi alegría, cuando me desconecto de todo”). El futuro: “Hasta los 31 años he hecho currículum y a partir de ahora me puedo preguntar qué es lo que me gusta”.