Un cajero automático entrega algo más delicioso que el dinero: pastelillos
Todo empezó cuando Candace Nelson, juez de del programa televisivo Cupcake Wars, que se transmite en Food Network, tuvo un antojo nocturno de panquecitos durante su embarazo.
Como fundadora de Sprinkles Cupcakes, una de las mayores fuerzas detrás de la locura actual por los panquecitos, ella debería de tener acceso las 24 horas a todos las panquecillos que quisiera, pero no era así.
Sprinkles ya había cerrado, y el antojo de Nelson no se cumplió. La empresaria estaba inspirada, y transformó su mala suerte en una mina de oro: un cajero de panquecitos de 24 horas.
“Es el concepto de hacer que cualquiera pueda tener un panqué recién horneado en cualquier momento”, dijo la vocera de Sprinkles, Vineet Chaplot. “Tenemos muchos clientes a los que les gusta venir más tarde en la noche”.
La bóveda tiene 600 panqués y está enfrente de la tienda Sprinkles de Beverly Hills. Se ve un poco peculiar comparado con sus vecinos elegantes, pero al mismo tiempo, encaja perfecto con las estrellas que caminan por ahí.
Para el peatón casual, parece como un cajero normal de dinero, pero a segunda vista es otra historia. Los clientes usan una pantalla táctil para empezar, ahí aparece un menú de panquecitos, mezclas de pastel, envoltorio y panqués para perro (Si, panquecillos hechos especialmente para perros). Después de escoger deslizan su tarjeta de crédito y esperan la parte divertida.
“Mientras autorizan tu tarjeta, verás la toma de la cámara sobre el brazo robot que agarra el panqué que te vas a llevar”, dijo Chaplot. El brazo robótico pone tu panqué en una plataforma y después la delicada caja aparece al girar el cilindro.
“Estamos reabasteciendo los panquecitos día y noche para que todos se lleven un panqué fresco. No es algo que ha estado ahí mucho tiempo”.
En la develación del martes, docenas de curiosos aficionados a los panquecillos asistieron a Sprinkles para ser los primeros en probarlos.
“Escuché de esto y no lo podía creer”, dijo Susanna Adler. “Acabo de decirle a mis amigos en Nueva York que tenía que venir a verla, fue muy excitante, pude ver la caja entera del panqué saliendo. Fue como ir a un cajero de dinero pero en su lugar recibí chocolate, que es mucho mejor que dinero”.
Algunos clientes elegantes fueron vistos preguntándoles a sus perros si querían uno.
Sprinkles explotó hacia el escenario de la repostería hace 7 años y tuvieron muchos seguidores entre la élite de Hollywood. Oprah, Katie Holmes, Jake Gyllenhaal y Lindsay Lohan son sólo algunos de sus mayores fans.
Dentro de la ajetreada tienda, los panqués cuestan tres dólares con 50 centavos. El mismo producto en el cajero de panquecitos costará cuatro dólares, 50 centavos de comisión que incluyen el uso del cajero, el envoltorio, la experiencia original y la practicidad.
“No tengo el tiempo para esperarme en esa gran cola, entonces es genial, me tomó dos segundos”, dijo la cliente Jennifer Denman. “Amo las nuevas ideas y las nuevas tecnologías”.
Sparkles está expandiendo esta tecnología a lo largo del país. Nueva York, Washington D.C. y Chicago verán estos cajeros de panquecillos este verano.