Pasajeros le dan un empujón a su avión para hacerlo despegar en Siberia
¡Sí, esto realmente sucedió! Un grupo de pasajeros dejó sus asientos para darle un empujón a su avión congelado en un aeropuerto por la nieve en Siberia.
Esa era la situación en el Aeropuerto de Igarka a principios de esta semana, donde las temperaturas de menos 50 grados Celsius dejaron un avión Tupolev Tu-134 varado en la pista.
Los pasajeros se unieron al rescate cuando el aceite en el tren de aterrizaje del avión se congeló, según UTair, la compañía aérea que maneja el avión.
Según el sitio web Komsomolskaya Pravda, hubo gritos de "¡Vamos!" mientras dos filas de pasajeros, vestidos con abrigos y guantes gruesos, cada uno tomó un ala y al parecer comenzó a empujar el avión.
If the winter weather affects your travel, hopefully you won't have to help move your plane like these passengers!
pic.twitter.com/KMNqDF8YQt
— New Day (@NewDay) noviembre 26, 2014
"Todos queríamos llegar a casa", dijo uno de los voluntarios que fue citado por el diario.
Videos e imágenes que circulan en las redes sociales muestran a los pasajeros moviendo la aeronave, a pesar de los duros vientos y temperaturas bajo cero.
Komsomolskaya Pravda dijo que las autoridades rusas estaban investigando si las normas de seguridad de la aviación se habían vulnerado por el poco ortodoxo despegue.
UTair dijo que el avión era operado por una filial, Katekavia, y que las maniobras de estacionamiento de aeronaves y las condiciones de salida eran responsabilidad de los servicios de tierra del aeropuerto.
"Los problemas en la salida fueron causados por las condiciones meteorológicas, en especial, por la temperatura extremadamente baja del aire que es típica de esta parte de la región de Krasnoyarsk y en ocasiones llega tan baja como menos de 50 grados Celsius," dijo a CNN un vocero de UTair.
"Mientras que el avión estaba estacionado en el aeropuerto de Igarka, su tren de aterrizaje se congeló en la superficie del aeródromo. Con el fin de resolver rápidamente este problema los pasajeros ayudaron al camión de remolque a mover el avión."
El avión y los pasajeros pudieron despegar y aterrizar con seguridad varias horas después en Krasnoyarsk, al sur de Igarka.
Afortunadamente no hubo necesidad de empujar aún más en su destino con la temperatura de menos 11 grados.
