Un sospechoso de terrorismo enfrenta pena de muerte en Indonesia
Los fiscales de Indonesia presentaron de manera oficial los cargos de terrorismo contra el clérigo radical, Abu Bakar Bashir, que lo hacen elegible a la pena de muerte.
Las acusaciones incluyen financiar e incitar a otros al terrorismo y planear e intentar actos terroristas. Bajo la ley de este país, algunos de esos cargos conllevan la pena de muerte, de acuerdo con un comunicado de la Oficina del Fiscal General.
Bashir fue detenido en agosto por su presunta vinculación con un campamento de entrenamiento militar allanado a principios del 2010 por las autoridades en la provincia de Aceh.
La policía dijo que Bashir y su relativamente nueva organización, el Jamaat Tawhid Anshor o JAT, estaba involucrada en el establecimiento del campamento. Los militantes se preparaban para lanzar ataques similares a los de Mumbai en 2008, y para intentos de asesinato de funcionarios del gobierno de Indonesia, dijeron las autoridades.
Según la ley, la detención de Bashir puede expirar el 10 de febrero. Uno de los abogados de Bashir, Adnan Wirawan, dijo que el juicio podría comenzar en unas dos o tres semanas.
Hizo hincapié que "todas las acusaciones son muy débiles. Esto de nuevo es algo que las fuerzas del orden fabricaron", dijo.
En el pasado, las autoridades intentaron vincular directamente a Bashir con algunos de los mayores ataques terroristas en Indonesia, pero fallaron.
Este sería su tercer juicio. En los dos primeros, los fiscales intentaron vincular directamente el viejo clérigo a los atentados con bomba de 2002 en Bali y del JW Marriot de 2003 en Jakarta.
Los tribunales lo declararon culpable de cargos relativamente menores. Fue liberado en junio de 2006, después de pasar 25 meses en prisión.
Bashir es conocido por su feroz retórica. Fue acusado de ser el líder espiritual de la red terrorista surgida en Indonesia, Jemaah Islamiyah, que inspiró a muchos de los que participaron en los atentados terroristas.
Bashir siempre ha negado todas las acusaciones y a menudo culpa de una conspiración dirigida por EU para ponerlo tras las rejas.
