La OTAN promete evitar las muertes de civiles afganos en sus ataques
La OTAN expresó su "profundo pesar" este miércoles tras un ataque aéreo de la coalición en el que murieron ocho jóvenes afganos la semana pasada.
La Fuerza Internacional de Asistencia (ISAF) ofreció sus condolencias y dijo que está investigando el ataque contra una aldea en la provincia de Kapisa, al noreste de Kabul.
"Aunque las circunstancias exactas de este trágico incidente no se habían determinado, la ISAF está tomando las medidas necesarias para esclarecer los hechos, y evitar situaciones similares en el futuro", dijo la OTAN en un comunicado.
El presidente afgano, Hamid Karzai, condenó enérgicamente el ataque de la semana pasada.
Las muertes de civiles como resultado de la acción de la coalición internacional liderada por la OTAN causaron la ira en Afganistán, añadiendo presión sobre las fuerzas internacionales para retirarse.
La fuerza internacional ha dicho que evitar las bajas civiles es una alta prioridad, una promesa que repitió tras las recientes muertes.
"La misión de mi mandato es proteger a la población civil de Afganistán", dijo el general John R. Allen, comandante de la fuerza internacional. "Me tomo muy en serio la pérdida de cada vida afgana. Vamos a seguir haciendo todo lo posible para garantizar la seguridad de la población afgana."
El número de muertes civiles causadas por la ISAF se redujo en casi 17% entre 2010 y 2011, dijo en su informe mensual de diciembre la fuerza de la coalición.
Los insurgentes causaron más del 85% de las muertes y lesiones de civiles en 2011, según el informe.