El mayordomo del Papa no es un 'chivo expiatorio', señala el Vaticano
El vocero del Vaticano, Federico Lombardi, negó este lunes que el asistente del Papa, Paolo Gabriele, el único detenido con relación a las filtraciones de documentos confidenciales, sea un “chivo expiatorio”.
“Me parece que está lo suficientemente claro que la idea del 'chivo expiatorio' no responde a la realidad. Se le han encontrado cosas y ahora buscamos e intentamos saber. No, no hemos encontrado al 'chivo expiatorio'”, dijo, según EFE.
Lombardi, quien ha descartado la renuncia de Benedicto XVI por el escándalo , aseguró que la aparente lentitud de las investigaciones se debe a que se están realizando escrupulosamente.
“Hemos encontrado un elemento concreto y ahora se quieren comprender las eventuales responsabilidades más allá de la persona involucrada”, agregó, según Notimex.
El ayudante a Benedicto XVI, un suizo-italiano de 46 años permanece en una celda en la Gendarmería Vaticana desde el 23 de mayo, cuando fue detenido en posesión de correspondencia personal del Papa, lo que le valió ser imputado por “robo agravado”.
Algunas versiones de la prensa y analistas sostienen que Gabriele no pudo haber actuado solo en el plan para robar, reproducir y filtrar los documentos. Tras el arresto de Gabriele, el diario La Repubblica publicó otro documento confidencial, aumentando los rumores de que hay más personas involucradas en el escándalo y de que el asistente papal es solo usado para distraer la atención.
El proceso contra Gabriele continúa . La semana pasada fue sometido a dos largos interrogatorios en los cuales estuvieron presentes sus abogados, Carlo Fusco y Cristiana Arru. Mientras, los jueces buscan pistas en el material decomisado.
En tanto, los abogados de Gabriele pidieron que su cliente sea excarcelado y esperan la decisión del juez sobre el caso, detalló Lombardi, según un reporte de EFE.
Las autoridades de la Santa Sede buscan posibles elementos para tener “un cuadro definitivo y concreto de la situación”, aunque no se tienen contemplados interrogatorios inminentes a Gabriele, aseguró el vocero vaticano, según EFE.
El mayordomo tiene garantizados todos sus derechos, puede ver a sus familiares, a los abogados defensores e ir a misa”, aseguró Lombardi. El domingo, Gabriele asistió a misa custodiado por dos agentes de la Gendarmería Vaticana, según el vocero vaticano.
El asistente está dispuesto a colaborar para que se sepa la verdad, según su abogado.
Lombardi aseguró que el Vaticano no descarta pedir la colaboración de las autoridades italianas. En caso de intentar interrogar a un ciudadano italiano, sería necesaria una rogatoria internacional, dijo.
El proceso contra Gabriele es el último episodio del escándalo llamado por la misma Santa Sede como Vatileaks, el cual inició en enero pasado con las publicación de cartas enviadas al Papa por parte del arzobispo Carlo María Viganó, entonces encargado del gobierno del Vaticano.
En la carta, Viganó denunciaba corrupción y mala gestión en la Santa Sede, particularmente contra el Banco Vaticano.
Benedicto XVI encargó la investigación del caso a una Comisión Cardenalicia presidida por el español Julián Herranz, de 82 años, con el fin de esclarecer los hechos.
Analistas han señalado que difusión de documentos es un intento por desestabilizar la administración del Vaticano, en manos de Tarcisio Bertone . Los ataques, atribuidos a gente afín al exsecretario de Estado vaticano, Angelo Sodano, buscan reducir el poder de Bertone como preparación para evitar que coloque a una figura cercana en una eventual sucesión de Benedicto XVI.