El veto a 'Rápido y Furioso' genera sospechas entre los republicanos
El titular de una comisión de la Cámara arremetió contra el presidente Barack Obama por el uso de la inmunidad o veto del ejecutivo en la investigación del comité sobre la operación de tráfico de armas conocida como Rápido y Furioso, y pidió al presidente reconsiderar su acción.
El presidente del Comité de Supervisión de la Cámara, Darrell Issa hizo estas declaraciones en una carta dirigida al presidente y fechada el lunes, mientras la Cámara se prepara para votar esta semana una resolución de desacato contra Eric Holder , el secretario de Justicia de EU.
El comité recomendó la votación después de que Holder se negó a entregar todos los documentos solicitados para la investigación de la polémica operación emprendida por la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés).
La medida se produjo después de que el presidente Barack Obama hiciera valer su facultad de veto sobre algunos documentos solicitados por la comisión. La acción de la Casa Blanca significa que el Departamento de Justicia puede retener parte de los documentos.
La ATF lanzó la Operación Rápido y Furioso en Arizona para rastrear la compra de armas por parte de los cárteles mexicanos del narco.
Sin embargo, la operación ha sido muy criticada después de que perdió la pista de más de 1,000 armas de fuego que la agencia había permitido a los compradores ficticios cruzar través de la frontera, y dos de las armas perdidas aparecieron en el 2010, en la escena del crimen en la cual murió el agente de la Patrulla Fronteriza de EU, Brian Terry.
Issa dijo que hacer valer la inmunidad del ejecutivo por parte de Obama se traduce en que él y sus asesores de más alto rango estuvieron involucrados en “la gestión” de Rápido y Furioso y “todo lo que se desprende de ella”, o que el presidente hizo valer una facultad que sabe que es injustificada “con el propósito de seguir obstaculizando una investigación del Congreso”.
“Hasta la fecha, la Casa Blanca ha mantenido firmemente que no ha tenido papel alguno en la asesoría del Departamento de Justicia con la investigación llevada a cabo por el Congreso. El sorpresivo recurso de inmunidad utilizado por el ejecutivo planteó la cuestión de si lo anterior es el caso”, dijo Issa en su carta. No hubo respuesta inmediata a la carta por parte del gobierno de Obama.
La votación en la Cámara, prevista para el jueves, sería la primera vez en la historia que un secretario de Justicia en funciones es citado por desacato al Congreso, dijo el lunes a CNN un asistente de la dirección del Partido Republicano.
“Le exhorto a que reconsidere la decisión de retener los documentos que permitirían al Congreso completar su investigación”, dijo el republicano de California en la carta. “Mantengo la esperanza de que el secretario de Justicia presentará los documentos especificados, y así podamos trabajar para solucionar este asunto sin necesidad de una resolución por desacato”.
Ha existido un enfrentamiento entre Issa y Holder por el programa Rápido y Furioso, el cual se remonta al año pasado tras las decisiones emitidas por el comité de la Cámara.
El comité de Issa ha buscado los documentos que demuestren las razones por las cuales el Departamento de Justicia decidió retirar en calidad de imprecisa una carta enviada al Congreso en febrero de 2011, la cual decía que los altos funcionarios se acababan de enterar de la operación Rápido y Furioso. No obstante, Holder se ha negado a entregar los materiales que contienen las deliberaciones internas, y la semana pasada le solicitó a Obama hacer valer la inmunidad del ejecutivo sobre dichos documentos.
Jay Carney, vocero de la Casa Blanca, aseguró que la investigación republicana tiene “motivos políticos, está respaldada por los contribuyentes y busca beneficios en un año de elecciones”. La líder demócrata en la Cámara, Nancy Pelosi, dijo que los republicanos apuntan contra Holder porque él está luchando contra sus intentos de suprimir la participación de los electores en noviembre. Issa dijo que el uso del veto ejecutivo plantea más preguntas que respuestas. El republicano se reunió con Holder el 19 de junio para solucionar la cuestión antes de la votación de la comisión por el desacato. Dijo que Holder quería “lograr la paz”.
“Él ha manifestado su voluntad de entregar la 'considerable recopilación' de documentos posteriores al 4 de febrero. Me dijo que iba a proporcionar la 'considerable recopilación' de los documentos bajo tres condiciones: Que cancelara definitivamente la votación de desacato; que aceptara que el Departamento estaba en pleno cumplimiento de las citaciones del Comité, y; que aceptara la ‘considerable recopilación’ sin examinarla”, dijo Issa. Calificó a las condiciones impuestas por Holder como “inaceptables”.
“La propuesta condicional del secretario de Justicia de una ‘considerable recopilación’ de un subconjunto de documentos amparados por la citación, y el haber hecho valer su veto ejecutivo, de ninguna modo sustituye el hecho de que el Departamento de Justicia sigue siendo muy deficiente en su cumplimiento de las citaciones del Comité. Por reconocimiento expreso del Departamento, ha retenido más de 130,000 páginas de documentos delicados”, dijo.
El republicano hizo hincapié en la importancia de forjar un acuerdo en lugar de buscar el proceso por desacato al Congreso. “Mientras tanto, para que el Comité y el público puedan comprender mejor su papel, y el papel de sus principales asesores en relación con la Operación Rápido y Furioso, por favor aclararen la cuestión planteada por haber recurrido a la inmunidad del ejecutivo”, dijo en la carta dirigida a Obama.
“¿Hasta qué punto estuvieron usted o sus principales asesores involucrados en la Operación Rápido y Furioso y lo que de ello se desprende, incluyendo la carta apócrifa entregada por el Procurador General al Comité el 4 de febrero de 2011? Por favor señale también los comunicados reuniones y teleconferencias entre la Casa Blanca y el Departamento de Justicia entre el 4 de febrero de 2011 y el 18 de junio de 2012, el día anterior a que el secretario de Justicia le solicitara utilizar el veto del ejecutivo”.
Issa hizo referencia a las “desastrosas consecuencias” del programa: un agente muerto de la Patrulla Fronteriza, su dolida familia en busca de respuestas, un sinfín de muertes en México, y el efecto de estropear nuestra relación con ellos”.
Dijo que demócratas y republicanos del comité están de acuerdo en que la familia de Terry, sus colegas de la patrulla fronteriza, el gobierno mexicano, y los estadounidenses “merecen respuestas”.