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La OTAN da detalles del ataque al campamento de Enrique en Afganistán

Los quince individuos que ingresaron a Camp Bation portaban uniformes del Ejército de EU, lo cual constituye una nueva táctica insurgente
dom 16 septiembre 2012 12:09 PM

Los insurgentes afganos que perpetraron una atrevida y bien planeada incursión al campamento militar donde el príncipe Enrique de Gran Bretaña hace base llevaban puestos uniformes del Ejército de Estados Unidos, informó la OTAN.

Seis aviones fueron destruidos y dos marines estadounidenses murieron en el ataque de este fin de semana.

El uso de uniformes militares de Estados Unidos podría ser una nueva táctica insurgente. La Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad (ISAF, por sus siglas en inglés) no pudo proporcionar a CNN ejemplos anteriores de dicha táctica.

Combatientes bien entrenados y ensayados llevaron a cabo el continuo ataque en Camp Bastion, en la provincia de Helmand, dijo la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad de la OTAN.

Alrededor de 15 insurgentes organizados en tres equipos penetraron el cerco que rodea la base y provocaron daños considerables, destruyendo seis estaciones de reabastecimiento de combustible y dañando seis hangares para aeronaves.

Los atacantes llevaban rifles automáticos, lanzagranadas propulsados por cohetes y chalecos suicidas.

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Destruyeron seis aviones AV-8B Harrier e hicieron daño a otros dos antes de que concluyera el ataque, detalló la coalición.

Catorce de los combatientes murieron y uno fue herido y capturado, informó la ISAF. Ocho integrantes de la coalición militar y un contratista civil resultaron heridos.

Es muy pronto como para decir si los atacantes tenían “información privilegiada”, dijo James Graybeal, vocero de la ISAF.

La ISAF no aclaró cómo los atacantes consiguieron los uniformes militares, sin embargo, el personal de CNN que ha estado en Afganistán dice que éstos se pueden comprar en los mercados de la región.

El príncipe Enrique es un piloto de helicóptero Apache con base en Camp Bastion, sin embargo, el Ministerio de Defensa británico rechazó categóricamente los informes dominicales de la prensa británica de que él estaba a solo unos cientos de metros de distancia del tiroteo.

Enrique, nieto de la reina Isabel II y tercero en la línea sucesoria al trono británico, “de ninguna forma estuvo en peligro” durante el más reciente ataque, dijo antes el vocero de la ISAF, el comandante Martin Crighton.

La ISAF informó este sábado que el campamento es seguro y que el ataque no “impactó” las operaciones aéreas y terrestres.

Camp Leatherneck, el lado estadounidense de la base, no resultó afectado por el ataque, dijo a CNN el comandante Adam N. Wojack, vocero de la ISAF.

La base conjunta está localizada en una lejana región desértica en Helmand, una provincia sureña en tierras del Talibán.

El Talibán señaló que llevó a cabo el ataque como una respuesta al filme antiislámico que provocó enojo en los países con mayoría musulmana. Sin embargo, Crighton dijo que no hubo manifestaciones organizadas afuera de sus puertas antes del ataque.

Afganistán solamente ha presenciado manifestaciones relativamente pequeñas y pacíficas en contra de la película en una semana en la que hubo protestas en más de una decena de países.

Por otro lado, atacantes vestidos de policías afganos asesinaron a cuatro soldados de la coalición en las primeras horas del domingo en el sur de Afganistán, dijo el Graybeal, vocero de la ISAF.

No dio más detalles, más allá de decir que las tropas murieron “después de un ataque interno que involucró a la policía afgana”. No dijo de dónde eran los soldados o en qué lugar fueron asesinados.

El ataque es el más reciente de una serie de incidentes en los cuales los integrantes de las fuerzas de seguridad afganas han sido sospechosos de disparar sus armas contra soldados de la coalición o afganos, en una acción conocida como ataques green on blue.

Más de 50 soldados de la coalición han muerto este año debido a este tipo de ataques.

Las muertes del domingo se produjeron un día después de que el Ministerio de Defensa británico diera a conocer que dos soldados habían sido asesinados en el distrito de Nahr-e Saraj, en la provincia de Helmand.

En ese ataque, un hombre vestido con uniforme de la policía afgana hirió mortalmente a dos integrantes del tercer Batallón en un puesto de control militar, dijo el comandante Laurence Roche, vocero de la Fuerza de Tarea de Helmand, en un comunicado difundido por el Ministerio.

El asesinato ocurrió el mismo día que otro soldado británico murió en otro incidente en Nahr-e Saraj, según el Ministerio. Murió cuando su vehículo golpeó una bomba.

Chelsea J. Carter, Adam S. Levine, Jessica King y Greg Botelho, de CNN, contribuyeron a este reporte.

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