Los cardenales se reúnen para acordar el calendario de elección del Papa
Cardenales católicos se reúnen por segundo día consecutivo este martes en el Vaticano, mientras se preparan para establecer un calendario para la selección de un nuevo Papa.
Un total de 110 de 115 cardenales electores, aquellos menores de 80 años quienes pueden elegir al papa, están ahora en Roma, dijo el vocero del Vaticano, Federico Lombardi, este martes.
Cinco cardenales electores, que aún no han arribado, han estado en contacto con el Colegio Cardenalicio, dijo Lombardi.
Aún no ha sido propuesta una fecha para el cónclave que elegirá al sucesor de Benedicto XVI, dijo Lombardi.
No es necesario que todos los cardenales electores estén presentes para que sea fijada una fecha para el cónclave, pero se dispondrá de tiempo para que lleguen los restantes, dijo Lombardi.
Otro vocero del Vaticano, Thomas Rosica, dijo que “no hay deseo de acelerar las cosas, sino de tomar este momento de discernimiento y reflexión”.
La Capilla Sixtina será cerrada al público a partir de las 13:00 (hora local) de este martes, para que comience a ser preparada para el cónclave.
Los cardenales que ya están en Roma se reunieron dos veces este lunes, por la mañana y por la noche, en las denominadas Congregaciones Generales.
A la sesión de la mañana —a la que asistieron 142 cardenales, 103 de los cuales eran cardenales electores— no se tomó una decisión para el cónclave que elegirá al sucesor de Benedicto XVI, dijo el vocero del Vaticano, Federico Lombardi.
"Está en la mesa, pero ninguna decisión ha llegado", dijo Lombardi.
El grupo decidió que las congregaciones de este martes y miércoles se llevarán a cabo en la mañana solamente, añadió.
Las Congregaciones Generales son un paso clave antes del cónclave, en el que todos los cardenales menores de 80 años se encuentran en el Vaticano para votar por el próximo Papa.
Según los medios italianos, los debates se centraron este lunes en una investigación interna sobre las fugas del Vaticano, cuyo resultado hasta ahora ha sido visto sólo por el papa emérito Benedicto, y el manejo de la iglesia del escándalo por abuso sexual de menores por parte de sacerdotes.
Transferencia de poder
Benedicto XVI anunció su intención de dimitir el 11 de febrero y renunció el jueves pasado, convirtiéndose en el primer Papa en renunciar en 600 años.
La transferencia del poder papal casi siempre ha ocurrido después de que el Papa muere.
Normalmente, el Colegio de Cardenales no elige al nuevo Papa hasta 15 días después de que la sede se declara vacante. Sin embargo, Benedicto reformó la política que tenía la Iglesia desde hace 500 años para que se eligiera a un sucesor más rápidamente.
Los cardenales podrían nombrar a un sucesor antes del 15 de marzo, de acuerdo con Lombardi. Esto daría un poco más de una semana para que el Papa se prepare para la misa del domingo de ramos, el próximo 24 de marzo.
En las casas de apuestas, en Europa, algunos cardenales se han posicionado como favoritos para ser el próximo líder de la Iglesia católica.
Entre ellos se incluye el arzobispo Angelo Scola, el cardenal Tarcisio Bertone, de Italia; el cardenal Peter Turkson de Ghana, que podría convertirse en el primer Papa africano desde la muerte de Gelacio I hace 1,500 años; y el cardenal Marc Oullet, de Canadá, que podría convertirse en el primer Papa de América del Norte.
Aun cuando Benedicto XVI no estará envuelto directamente en la selección de su sucesor, sin duda tendrá influencia, tras haber nombrado a 67 de los 115 cardenales con derecho a votar y ser votados.
Los cardenales pueden votar por el Papa en persona, mediante una boleta de papel. Aunque algunos de ellos se encuentran en el Vaticano, muchos se encuentran en diócesis y arquidiócesis alrededor del mundo, y tienen que viajar a Roma.
Según Lombardi, 75 cardenales normalmente viven en Roma, y otros 66 ya llegaron o están en proceso de llegar, lo que hace un total de 141 cardenales. Sin embargo, la mayoría de los que viven en Roma ya están retirados o tienen más de 80 años, por lo que no pueden participar en el cónclave.
Una vez que comienza el proceso, a los cardenales que participan en el cónclave se les prohíbe hablar con cualquier persona fuera de la reunión, y tampoco pueden dejarla hasta que el voto está concluido, lo que es anunciado con la salida de humo blanco de la chimenea del Vaticano , informándole al mundo que se ha elegido a un nuevo pontífice.