El ataque en Boston extrema la postura de la oposición a la ley migratoria
El plan bipartidista de reforma al sistema de inmigración de Estados Unidos, que lleva meses en proceso, enfrentó retrasos esta semana mientras que los legisladores y el presidente Barack Obama se concentraban en el atentado en Boston.
La medida, que se presentó formalmente ante el Senado, ya se enfrenta a los ataques de algunos opositores a la reforma inmigratoria, quienes afirman que el atentado del lunes debería ser una razón para reconsiderar cualquier reforma que facilite a los inmigrantes obtener la ciudadanía.
El congresista Louie Gohmert dijo en el canal estadounidense C-SPAN que después de los atentados del lunes —en los que murieron tres personas y más de un centenar resultaron heridas— dejó de pensar en las familias de las víctimas y empezó a pensar en los riesgos de seguridad que implica la inmigración.
Gohmert recuerda haber pensado: “Oh, Dios, hemos visto esto en Israel. Israel sufrió los ataques, las muertes y la mutilación por tanto tiempo hasta que finalmente el pueblo israelí dijo: ‘Saben qué, ha sido suficiente’. Construyeron un muro —el 70% es una cerca— para evitar que los francotiradores derribaran a sus niños. Finalmente acabaron con la violencia local de parte de personas que querían destruirlos. Me preocupa que tengamos que hacer eso”.
Gohmert, un republicano conservador que tiene una larga trayectoria de oposición a las políticas de Obama, reconoció que aún hay que determinar si el ataque del lunes había sido obra de un terrorista extranjero o local. Sin embargo, sostuvo que la seguridad estadounidense estaba en riesgo si se permitía que los inmigrantes que habían llegado ilegalmente al país se quedaran.
“Sabemos que la gente recibe entrenamiento para comportarse como hispanos cuando en realidad son radicales islamistas”, dijo. “Sabemos que estas cosas pasan y es una locura no protegernos ni asegurarnos de que las personas que entran quieren las libertades de las que gozamos”.
Sus comentarios fueron similares a los que hizo el martes otro legislador republicano, Steve King. Dijo a la revista National Review que los atentados de Boston deberían impulsar que se investigue a fondo el sistema de entrega de visas para estudiantes.
“Algo que se especula a causa de esto es que se trató de un extranjero y —estoy especulando— que posiblemente era una persona que tenía una visa de estudiante”, dijo King a Robert Costa, de la National Review. “Si ese fuera el caso, entonces necesitamos ver el panorama completo”.
Después de que la National Review publicara en internet la entrevista a King, el consulado de China en Nueva York señaló que una ciudadana china era una de las tres personas muertas en los atentados terroristas del lunes. La víctima era una estudiante de posgrado de la Universidad de Boston, según la institución.
“Tenemos que estar más atentos que nunca. Tenemos que poner más atención a nuestros cruces fronterizos ”, prosiguió King, y agregó: “Tenemos que analizar el programa de exención de visas y preguntarnos qué estamos haciendo. Si no podemos revisar los antecedentes de la gente que viene de Arabia Saudita, ¿cómo podemos pensar que podremos revisar los antecedentes de entre 11 y 20 millones de personas que están aquí, procedentes de quién sabe dónde?”
Dos de los republicanos que ayudaron a redactar la legislación inmigratoria que se presentó ante el Senado desecharon el martes las afirmaciones de Kind y Gohmert, y las calificaron como especulaciones excesivas.
El senador Marco Rubio dijo que los legisladores serían “muy cuidadosos de usar palabras que relacionen estos dos asuntos en cualquier sentido”, y agregó que era demasiado prematuro sacar conclusiones acerca de los cambios en la política.
“Sabemos muy poco sobre lo que ocurrió en Boston, fuera de que evidentemente fue un acto terrorista”, dijo Rubio. “No sabemos quién lo ejecutó ni por qué, y yo recomendaría a todos que fueran cuidadosos al relacionar ambos temas”.
Rubio es un personaje clave en el intento de aprobar una reforma inmigratoria integral este año, que se ha enfrentado con la firme oposición de los republicanos en el pasado. Este domingo, se presentó en todos los programas matutinos de televisión para impulsar el plan bipartidista del Senado, que incluye requisitos para reforzar la seguridad fronteriza como condición para que los inmigrantes indocumentados soliciten su ciudadanía.
El senador republicano John McCain es otro de los miembros del Grupo de los ocho que desarrolló la propuesta de inmigración, que se presentó el miércoles. Tras reunirse el martes con Obama, dijo que era prematuro relacionar la reforma inmigratoria con los atentados en Boston.
“Yo diría que la aprobación de la inmigración integral mejoraría nuestra capacidad de mantener a salvo a nuestro país”, dijo McCain, quien citó varios elementos de la propuesta, entre ellos el requisito de solicitar documentos a quienes entran y salen del país.
Paul Steinhauser y Kevin Liptak, de CNN, colaboraron con este reportaje.