Niños de ocho años podrán ser cazadores en una comunidad de España
Los niños de ocho años podrán ser cazadores en una provincia de España, siempre y cuando los acompañe un adulto y no utilicen armas. Sin embargo, deberán tener 14 años para poder empuñar un rifle.
El Parlamento de las Islas Baleares, con sede en Mallorca, aprobó este martes una reforma para que los niños de ocho años puedan "asistir a cacerías" de animales.
La modificación pretende que los menores puedan desarrollar "todas las acciones inherentes al ejercicio de la caza".
El parlamento local, con mayoría conservadora del Partido Popular (PP), aprobó la modificación de la ley de caza impulsada por el Consejo de Mallorca bajo el argumento de que “se mantenga la tradición cinegética (o de la cacería)”.
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Sin embargo, dicha medida fue criticada por legisladores del Partido Socialista Obrero Español, quienes rechazaron la presencia de niños en el ejercicio de la cacería sin la existencia de un control previo que los certifique como cazadores.
Con la nueva ley, los niños de ocho años podrán tomar parte en caza con perros y hurones, además de trampas de redes y lazos, prácticas que, de acuerdo con los impulsores de la iniciativa aprobada, forman parte de una actividad centenaria que se ha convertido en "una tradición" de la localidad.
La asociación ecologista Grupo de Ornitología Balear (GOB), criticó la modificación de la ley de caza tras considerar que actividades como la cacería no fomenta el respeto hacia la vida silvestre.
“La contemplación de la acción de dar muerte con las manos en tordos cazados con hilados o los conejos, no es de ninguna manera edificante y positivo para el desarrollo personal y social del niño, ni fomenta el adecuado conocimiento y respeto por la naturaleza", expresó el grupo a través de su sitio de internet.
Además de reducir la edad legal para la cacería, la nueva ley permitirá que los cazadores que hayan disfrutado de licencia durante los últimos cinco años, no tengan que superar una nueva prueba de aptitud para desarrollar actividades cinegéticas.
También elimina la necesidad de que los infractores sancionados por faltas graves tengan que pasar las pruebas de aptitud para una licencia de caza.