Los saqueos en Argentina se extienden por la ausencia de policías
Al menos tres personas han muerto y decenas han quedado heridas en Argentina, en medio de saqueos ante la ausencia de vigilancia por huelgas policiales, las cuales se han extendido a varias provincias del país.
Las autoridades han detectado un modus operandi que incluiría a bandas organizadas que aprovechan el paro de labores de los agentes.
El último incidente ocurrió durante la madrugada, cuando un hombre que supuestamente participaba en los saqueos falleció electrocutado en la ciudad de Concordia, en la provincia de Entre Ríos, ubicada al norte de Buenos Aires.
Los disturbios iniciaron el pasado miércoles en Córdoba, la segunda ciudad más importante del país, donde dos personas murieron y más de 200 resultaron lesionadas , antes de que los policías llegaran a un acuerdo salarial con el gobierno local, de acuerdo con un reporte de la agencia EFE.
Jorge Capitanich, jefe de Gabinete, dijo este lunes que los disturbios han sido similares en todas las provincias: comienzan con una huelga policial por reclamos salariales y grupos aprovechan para "generar caos y zozobra".
"No es casualidad que este aspecto autoritario pretenda socavar las bases de legitimidad democrática", dijo a reporteros el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, de acuerdo con un reporte de la agencia Télam.
"No es el método y la manera de plantear demandas salariales generando una extorsión a los gobiernos provinciales".
Hasta ahora, las provincias que han registrado disturbios son Buenos Aires, Río Negro (centro), Santa Fe (centro), Neuquén (suroeste), Catamarca (norte) y Chaco (norte), según EFE.
En Córdoba, Neuquén y Catamarca, los policías regresaron a las calles después de alcanzar acuerdos con las autoridades provinciales para mejorar sus sueldos, de acuerdo con la agencia.
Los saqueos en Concordia ocurrieron durante una huelga de un "puñado de 50 suboficiales, la mayoría con malísimos antecedentes", dijo el gobernador de Entre Ríos, Sergio Uribarri.
El funcionario señaló que no negociaron con los policías y que la seguridad había sido reforzada.
Uribarri coincidió con el jefe de gabinete en que los disturbios se deben a una provocación. “No le quepa la menor duda de que hubo instigación política”, dijo el gobernador, según Télam. "Ya tenemos información de videos y fotos para llevar a la justicia a algunos de los saqueadores pero también pretendemos lograr los nombres de los instigadores".
En la ciudad de la Plata, a unos 60 kilómetros al sur de la capital argentina, los policías locales y sus familias iniciaron una huelga para exigir un aumento a 12,500 pesos argentinos (unos 2,000 dólares).
"Los que están acá son los que no están de servicio. No hay abandono de tareas, no lo vamos a hacer nunca porque nuestro deber es brindar seguridad", dijo Nicolás Masi, secretario general del Sindicato de Policías de la Provincia de Buenos Aires, según un reporte de la agencia EFE.
Las policías provinciales dependen de los gobiernos locales, pero el gobierno de Cristina Fernández ha enviado fuerzas federales algunas zonas como Córdoba, para y está “monitoreando” la situación, dijo Capitanich.