La relación De Blasio con los Clinton, factor clave para la política de EU
El expresidente de Estados Unidos, Bill Clinton, tomó juramento formalmente a Bill de Blasio como alcalde de Nueva York este miércoles.
La maniobra pública del expresidente al parecer reafirmó los viejos lazos entre el nuevo alcalde, y Bill y Hillary Clinton, y podría arrojar dividendos políticos para la exsecretaria de Estado si es que decide postularse nuevamente a la presidencia en 2016 .
"Ver el progreso del alcalde ha sido una gran alegría para Hillary y para mí", dijo Bill Clinton, quien agregó que De Blasio "representa, junto con su familia, el futuro de nuestra ciudad y nuestro país".
De Blasio tiene una larga historia con los Clinton. Fue director regional del Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano durante la presidencia de Bill Clinton y fungió como director de la exitosa campaña de Hillary Clinton al Senado por el estado de Nueva York en 2000.
Aunque otros personajes opacaron a De Blasio durante su gestión de la campaña de Clinton, ha conservado sus lazos con ellos a lo largo de los años, lo que incluye su participación en la fallida campaña de la señora Clinton como aspirante demócrata a la presidencia.
Los Clinton no intervinieron en las primarias demócratas para elegir candidato a la alcaldía de Nueva York, ya que entre los varios aspirantes estaban el exasambleísta Anthony Weiner, quien está casado con una de las principales asistentes y asesoras de Hillary Clinton, Huma Abedin.
Sin embargo, una vez que De Blasio ganó las primarias, los Clinton lo apoyaron. Hillary Clinton fue la personalidad principal en un importante evento de recaudación de fondos para De Blasio en octubre, unas semanas antes de que arrasara en las elecciones y se convirtiera en el primer demócrata en encabezar el poder ejecutivo de la ciudad en dos décadas. Además, asistió el miércoles a la ceremonia de toma de protesta que ofició su esposo en el Ayuntamiento.
"Estoy seguro de que la secretaria Clinton está orgullosa de que Bill sea alcalde de Nueva York. Está claro que fue esencial para que Hillary llegara al Senado por Nueva York y a cambio ella le ayudó en su campaña, por lo que los lazos son duraderos y firmes", dijo Paul Begala, colaborador de CNN y estratega demócrata, asesor y amigo de ambos Clinton desde hace tiempo.
¿La maniobra podría ayudar a Clinton en 2016?
Si Clinton lanza otra campaña a la presidencia, inmediatamente pasaría a ser la aspirante principal a la candidatura demócrata. Sin embargo, en la izquierda hay personas —electores de las bases en las primarias y comités electorales demócratas— que miran con cautela los lazos de Clinton con Wall Street.
Tener a De Blasio de su lado servirá para que Clinton reúna a las bases del partido si se postula a la presidencia una vez más. De Blasio hizo énfasis en la desigualdad salarial cuando se postuló como alcalde, cosa que Bill Clinton respaldó cuando lo presentó durante la toma de protesta.
"Apoyo firmemente el compromiso esencial de la campaña de Bill de Blasio de tener una ciudad de oportunidades compartidas, prosperidad compartida, responsabilidades compartidas", dijo Clinton.
De Blasio se ha convertido en el héroe de la izquierda populista junto con la senadora por Massachusetts, Elizabeth Warren. "La íntima relación de Hillary con el nuevo alcalde de Nueva York —y el nuevo campeón de la izquierda progresista— se sumará a sus credenciales como candidata decidida en la lucha contra la desigualdad salarial e igualará el terreno para las familias trabajadoras que no creen que la economía esté funcionando en su favor a pesar de que sigue mejorando", dijo María Cardona, colaboradora de CNN, estratega demócrata y vocera y asesora de la campaña presidencial de Clinton en 2008. "Si se postula, aumentará su credibilidad y dará a los progresistas escépticos una razón para no buscar otro candidato".
La persona en la que algunos progresistas están pensando es Warren, aunque la senadora novata declaró que "no buscará la presidencia" en 2016 y se comprometió a "concluir" su periodo, que se extiende hasta 2018.
Con De Blasio del lado de los Clinton, algunos de esos progresistas podrían cambiar de opinión. "La familia política Clinton es extensa, está bien distribuida y es profundamente leal. Eso solo puede ser una ventaja, sin importar lo que ella decida hacer", agregó Begala.