Francisco critica la "pereza" y el "formalismo" de algunos católicos
El papa Francisco criticó este martes a los cristianos que van a misa todos los domingos pero que después pecan de "pereza" y "de formalismo".
"Es una enfermedad de algunos cristianos que van a misa, pero luego cuelgan el cartel de no molestar. No sirven. No hacen bien a la Iglesia", dijo el pontífice en la homilía matutina que celebró en su residencia, Casa Santa Marta, este martes.
El papa realizó esta reflexión al comentar el pasaje del Evangelio en el que Jesús encuentra a una paralítico a quien nadie ayuda y habló entonces de católicos "anestesiados", que van a misa pero después son incapaces de implicarse.
"Pienso en tantos cristianos, que son católicos, pero sin entusiasmo y están amargados. Van a misa todos los domingos, pero después piensan que no deben implicarse. Que tienen su fe, pero no deben darla a conocer a los demás. Cada uno en su casa y así todos tranquilos, piensan", dijo Francisco.
Para él, esta es la "enfermedad de la pereza de los cristianos" que hace de ellos "personas paradas, que no se preocupan por dar el anuncio del Evangelio" y que se convierten en "personas anestesiadas".
Arremetió contra esta actitud que dijo hace que los católicos "sean tristes y que no sean personas luminosas".
También habló de otro "pecado de los católicos" que definió como el "formalismo", es decir, los cristianos "que sólo se preocupan de tener todos los documentos en regla, todos los certificados".
"Cristianos hipócritas, como estos. A ellos solo les interesaban las formalidades", dijo en referencia a la lectura de hoy, para después lamentar: "¡Tenemos tantos en la Iglesia, tenemos tantos!".
Desde que tomó el liderazgo de la Iglesia católica hace más de un año, el papa Francisco ha criticado tanto al clero como a los fieles: ha pedido una Iglesia para los pobres, que salga a la calle, y ha hablado de cristianos "cerrados, tristes y atrapados" o que "recitan el credo como loros".